LOS INDICADORES MUESTRAN A UNA VICE GOBERNADORA CADA VEZ MÁS ALEJADA DE LUIS BEDER HERRERA.

Desde hace un tiempo, las relaciones entre el gobernador Luis Beder Herrera y la vicegobernadora Teresita Luna no pasan por el mejor momento. Los resultados de las elecciones marcaron a fuego los desencuentros entre los socios del Gobierno y luego se acentuó cuando la vieja dirigencia peronista, que ingresarán a la Legislatura, cenaron con Beder Herrera y el intendente Ricardo Quintela. La cena se dio en la casa de Alejandra Oviedo y la gran ausente, ya que no fue invitada, fue la presidenta de la Legislatura. Luego, Teresita Luna se quejó por El Independiente, ya que el gobernador se había ausentado de la provincia sin dejarla con los atributos de primera mandataria interina. Más tarde, el gobernador selló un acuerdo político con Quintela, a través de asistencia financiera “extra” -un secreto a voces en el ámbito político-, para que apareciera el lunismo oficializando el final de la alianza con el quintelismo, luego de las elecciones legislativas. Muchos acontecimientos políticos desde junio, el mes de los comicios, que sumaron un encuentro con un fuerte mensaje político: en silencio, Teresita Luna se fue a la Casa Rosada y fue recibida por el jefe de Gabinete de Ministros, Aníbal Fernández. Con foto incluida, Fernández otra vez se metió en la interna riojana, como ya lo hizo cuando Ángel Maza mantenía una pelea sin retorno con Beder Herrera. Fue una muestra de que las relaciones nacionales están intactas, ya que Aníbal Fernández se comprometió a gestionar los pedidos de la vicegobernadora para los riojanos, a los que atendió muy interesado. Y además el semanario dice que el diálogo se instaló de lleno en el plano político y que se explicitó la satisfacción del funcionario con el triunfo de Carlos Luna en las elecciones legislativas de junio pasado. Eso llevó a que como diputado provincial electo y ministro de Gobierno de Beder Herrera, Carlos Luna se diferenció del propio oficialismo, ya que pidió que las dos nuevas autoridades del Tribunal de Cuentas no sean elegidas por la actual conformación de la Legislatura. Así selló los desacuerdos internos con Beder Herrera por las últimas decisiones. Por lo cual, el lunismo liderado por la vicegobernadora y con el guiño de Carlos Luna dejó en claro que no está en nada de acuerdo con el gobernador, luego de reflejar las posiciones contradictorias por la minería o sumar a su proyecto a dirigentes a quienes había enfrentado. Por eso, el lunismo se pregunta si deja la Casa de Gobierno. Desde la Jefatura de Gabinete de la Nación siguen de cerca la pelea interna en el Ejecutivo, mientras que en los pasillos de la Casa Rosada caminan por diferentes pasillos Beder Herrera y Teresita Luna, quien sumó a sus filas a Carlos Chacón, que por su cargo en la Casa de La Rioja en Buenos Aires le permitió abrir muchas puertas en el kirchnerismo.