ANUNCIAN QUE A PARTIR DE JULIO, NINGÚN EMPLEADO PÚBLICO COBRARÁ MENOS DE 1.815 PESOS.

El ministro de Hacienda, Ricardo Guerra afirmó que con este aumento, complementario del otorgado en mayo, ningún trabajador del Estado cobrará menos de 1.815 pesos (incluida Quincenita) y resaltó la política salarial impuesta por el gobernador Luis Beder Herrera para redistribuir los ingresos de la provincia que son fruto de la excelente relación con el gobierno nacional. En términos anualizados, la provincia destina este año en los aumentos otorgados a los estatales un total de 180 millones de pesos. El aumento general a los empleados estatales fue durante este año del 21% al 28%. Esto se deduce del piso salarial que en abril era de 1.420 pesos, que en mayo pasó a ser de 1.650 con el incremento en porcentajes escalonados dispuesto y que benefició un poco más a quienes menos cobraban; y este aumento general complementario que lleva ese piso a 1.815 pesos y que incrementa en otro 10% el sueldo tomando como base el anterior piso salarial. En todos los casos se incluye el adicional no remunerativo denominado Quincenita. La medida comprende a los trabajadores de las tres funciones del Estado (Ejecutivo, Legislativo y Judicial) además de los municipios, con excepción de los docentes con quienes hubo acuerdos particulares antes del inicio del ciclo lectivo. El gobierno dispuso que el aumento otorgado tenga el carácter de no remunerativo y no bonificable. “Se decidió que todo el dinero disponible vaya directamente al bolsillo de los trabajadores”, explicó el ministro de Hacienda y agregó que con este aumento ningún empleado de la provincia va a cobrar menos de 1.815 pesos. Detalló que en términos anualizados, la provincia destina para los aumentos dispuestos en el presente ejercicio, un total de 180 millones de pesos que son distribuidos en toda la masa de trabajadores. Guerra explicó que si el aumento hubiese sido remunerativo y bonificable, sólo se podrían haber destinado 117 millones de pesos, un 35% menos a raíz de lo que hubiera significado destinar el dinero restante a afrontar el costo de los descuentos de obra social y jubilaciones. De todas maneras, indicó que las personas que están en condiciones de jubilarse, así como quienes accedieron al beneficio recientemente a partir de la Ley que creó la Caja Complementaria Provincial, no se verán perjudicados por cuanto van a percibir el 82% de su Haber de Bolsillo (que incluye a la Quincenita), indistintamente sean remunerativos o no remunerativos los componentes de sus salarios. La ANSeS liquida conforme la legislación que regula a ese organismo y que incluye la jubilación mínima, a la cual acceden la mayoría de los agentes públicos riojanos y la provincia complementa con la diferencia necesaria hasta llegar al 82% del Haber de Bolsillo (cuyo cálculo incluye el adicional no remunerativo Quincenita). Esta diferencia está liquidada en el mismo recibo del organismo nacional y los beneficiarios cobran en un solo pago. Cabe recordar además que el gobierno provincial dispuso que la jubilación mínima en La Rioja se calcule con el haber de bolsillo de la categoría 22. En cuanto a los docentes, que también cuentas con el beneficio previsional citado, no están contemplados en estos incrementos, pero el ministro de Hacienda informó que se respetarán los acuerdos firmados antes del inicio del presente ciclo lectivo. Desde el primer trimestre del 2007 –fecha en que asumió en forma interina el gobernador Beder Herrera-, hasta junio de este año, el gobierno dispuso incrementos que elevaron el gasto en los salarios de los trabajadores estatales riojanos en un 114%, no obstante haberse mantenido constante la cantidad de personal de la administración pública. En junio del 2007, la provincia disponía para el pago de los salarios de los agentes del Estado una suma mensual de 55 millones de pesos. En junio de este año, ese monto ascendió a 118 millones de pesos, es decir un 114% más. A partir de julio, con el aumento del 10% que complementa el incremento anterior para este año, la cifra de la carga salarial del Estado riojano se eleva a 129 millones de pesos, con lo cual, la provincia destina a sueldos estatales un 130 por ciento más que en marzo del 2007, cuando asumió Beder Herrera. Estos datos forman parte de la política de redistribución de los recursos que recibe la provincia, impuesta por el gobernador apenas asumió el cargo y que tuvo un carácter prioritario en materia de sueldos públicos, pero con la salvedad que las decisiones sobre los aumentos otorgados estaban ligadas a contar con los recursos necesarios y realizar las proyecciones en forma seria y responsable para no comprometer lo que no se iba a poder cumplir. La política salarial de los últimos tres años es consecuencia de una excelente relación política e institucional con el gobierno nacional, lo que además permitió dar por terminada toda una época (prácticamente 11 años) en que no se habían dispuesto reconocimientos en los sueldos de los agentes públicos provinciales.