sábado, 2 de julio de 2011

TRABAJO SOCIAL, UNA PROFESION QUE PROMUEVE EL CAMBIO.

El 2 de Julio, se celebra el día del Trabajador Social Argentino, una jornada instituida en 1961, durante las Segundas Jornadas Nacionales de Servicio Social, eligiéndose el día en que por entonces se celebraba la Visitación de la Santísima Virgen. En este marco la ministra de Desarrollo Social, Griselda Herrera distingue a aquellos que “ejercen esta profesión, los cuales  día a día aportan a que las  políticas públicas lleguen a la gente con el fin de promover una transformación de la realidad en la cual intervienen”. La cartera Social del gobierno cuenta con más de treinta profesionales que trabajan en terreno, realizando una evaluación de la situación de las personas con necesidades, promoviendo los cambios sociales, educando, concientizando, mediando y orientando a nuestra gente para hacer realidad la igualdad de oportunidades. El trabajador social participa en la gestión, formulación, ejecución, evaluación de planes, programas y proyectos sociales dirigidos a mejorar las condiciones de vida de la comunidad que se impulsan desde el Ministerio de Desarrollo Social. En sus orígenes, la profesión del asistente o trabajador social estuvo muy ligada a la labor social de la Iglesia Católica en Argentina. Actualmente es un factor importante en la formulación de estrategias para la prevención, promoción e integración social de las poblaciones más vulnerables. Es así que dentro del Estado, el trabajador social interviene en la elaboración de las  políticas públicas en materia social. Delimitando los propósitos y finalidades del desarrollo y la participación social de forma articulada con otros organismos. También  definen  nuevos procedimientos, normativas y mecanismos que tiendan a mejorar las intervenciones del Estado. En nuestra provincia se ha regularizado el ejercicio de la profesión mediante la Ley Nº 8.522. Esta norma establece al Trabajo Social como  la disciplina que tiene por objeto la intervención ante las necesidades sociales para promover el cambio, la resolución de los problemas en las relaciones humanas y el fortalecimiento y la libertad de la sociedad. Según esta Ley esta labor permite incrementar el bienestar, mediante la utilización de teorías sobre el comportamiento humano y los sistemas sociales y aplicando la metodología específica en la que se integra el trabajo social de caso, grupo y comunidad; estableciendo como fundamento y principios los Derechos Humanos y la justicia social.

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