Luego de compartir el acto junto al gobernador Beder Herrera y al ministro Norberto Yahuar, el gobernador de San Juan, José Luis Gioja sostuvo que a partir de la creación del Instituto Nacional de Olivicultura, se apunta a “marcar las indicaciones de origen y establecer normativas que regulen, entre otros aspectos, no para entorpecer, sino para favorecer la calidad”. En este sentido, recordó que anteriormente se firmó un acuerdo con el tema del vino, con el fin de tener cupo para hacer mosto, para proteger ese nicho de negocio, y también para poder equilibrar la existencia de vino, la oferta y la demanda, “esto para que no haya especulación, y no se aprovechen del trabajo del pequeño productor fundamentalmente”. En esta línea de trabajo, Gioja aseveró que “con este instituto de olivicultura buscamos que cuando veamos una botella de aceite de oliva que diga, por ejemplo, extra virgen y abajo Buenos Aires, realmente contenga aceite de este tipo, y no solo una cantidad ínfima de oliva y el resto desconocido”, y dijo que manifestaba esto sin tener absolutamente nada en contra de Buenos Aires. Afirmó que actitudes desleales de mercado como estas, atentan contra el sector, “esto nos tira abajo el mercado, nos perjudica y le quita genuinidad a un producto noble, que se está imponiendo en el mundo y que además es muy rico”. Asimismo sentenció que con la aceituna de mesa sucede algo similar. Por lo tanto, se apunta a “marcar las indicaciones de origen y establecer normativas que regulen, no para entorpecer, sino para favorecer la calidad. Si hay calidad, hay más valor agregado, y más rentabilidad para toda la cadena productiva, y eso es lo que necesitamos, que la cadena productiva, el pequeño productor, el mediano, el obrero, es decir quienes trabajan en la cadena, tengan los recursos que tienen que tener, porque eso significa crecimiento, progreso, y en quienes gobernamos el fin último es generar mucho progreso en nuestra querida Argentina”.
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