ESPECIALISTA EN POLÍTICAS MUNICIPALES DESTACÓ EL MODELO SAPEM.

El director de la Unidad de Gobiernos Locales y de la Maestría en Gobierno local de la Universidad Nacional de Quilmes, Daniel Cravacuore opinó que las Sociedades Anónimas con participación estatal mayoritaria (SAPEM) representan “un modelo de desarrollo muy interesante que está encabezando el Gobierno provincial y habrá que ver los resultados cuando estén en pleno funcionamiento”. “Los Municipios más modernos de la Argentina están en esta estrategia. Hay unas 50 empresas municipales en Municipios de la Argentina, incluso algunos tienen hasta su propia empresa de teléfonos”, señaló. Cravacuore comentó que la Municipalidad de Berlín, en Alemania, “es propietaria de 50 sociedades comerciales y creo que este es uno de los caminos que pueden emprender los Municipios en nuestro país”. Consultado sobre la imagen que se lleva de las SAPEM riojanas, el disertante se mostró “asombrado” por la velocidad de la construcción de las instalaciones de Cerdos de los Llanos, en el Departamento Rosario Vera Peñaloza. El académico expuso este miércoles sobre los desafíos del Sistema Municipal en la Argentina. La charla se concretó durante la segunda jornada del Congreso Internacional de Federalismo y Territorios, realizado en el Paseo Cultural “Pedro Ignacio de Castro Barros”. En su alocución, el académico destacó la necesidad de que los Gobiernos Municipales desarrollen una agenda local que les permitan gestionar y resolver los problemas de sus comunidades. Para Cravacuore “es clave” que los Municipios tengan una agenda local basada en la demanda, de manera que puedan identificar con precisión las carencias y necesidades reales de la gente para plantearlas ante las autoridades Provinciales y Nacionales. Esta agenda local implica tener bien en claro qué hace falta en cada Municipio para luego iniciar la gestión de las respuestas. Otro desafío es avanzar en una mayor integración territorial mediante el fortalecimiento de los Gobiernos locales más débiles. Este objetivo implica la necesidad de que todas las políticas públicas lleguen a todos los Gobiernos locales, a fin de que los vecinos de las zonas urbanas y rurales tengan las mismas posibilidades de desarrollo. La posibilidad de revertir estas carencias permitirá evitar la migración de los ciudadanos de las zonas rurales a las ciudades en busca de una mejor calidad de vida, explicó. Esta mayor integración territorial “debe garantizar derechos para todos los ciudadanos de la Argentina por igual”, afirmó. Cravacuore comentó que más de la mitad de los Gobiernos locales del país tienen menos de mil habitantes y en muchos de ellos se observa una enorme carencia de políticas públicas, lo cual genera un territorio desintegrado. Más adelante, propuso que los Gobiernos Provinciales ejecuten más políticas de fortalecimiento de los Municipios. Este fortalecimiento debe traducirse en un acompañamiento de la administración de los Gobiernos locales, la capacitación de sus empleados y el impulso a la innovación en la gestión, consideró. Otro desafío consiste en lograr que la conducción política de cada Municipio sea capaz de planificar la gestión que pretenden llevar a cabo, más allá de los instrumentos y las metodologías. Los Gobiernos locales no deben “resignar” esta capacidad de planificación que les permiten establecer objetivos a cumplir en determinados plazos. Por otro lado, Cravacuore entendió que una de las “grandes falencias” de los Municipios argentinos es la subexplotación de las oportunidades que brinda el marco normativo. En este sentido, apoyó la implementación de las Sociedades Anónimas con participación estatal mayoritaria (SAPEM) en nuestra Provincia, entre las que destacó el nivel de avance que está teniendo la obra de infraestructura de Cerdos de los Llanos, en el Departamento Rosario Vera Peñaloza. El expositor, explicó además que para poder enfrentar en mejores condiciones estos desafíos, los Municipios deben llevar a cabo una revisión crítica de la moda en el diseño de las políticas públicas. Este diseño debe llevarse a cabo en base a las reales condiciones de la comunidad local para la cual trabajan, explicó. El académico instó además a lograr una real valorización de los recursos humanos de los Municipios. Más allá de las demandas salariales, esta valorización implica poder escuchar sus inquietudes, conocer sus capacidades y poder ubicarlos en el puesto laboral en el que puedan aportar más a la gestión. “La primera estrategia es ubicar a cada trabajador municipal en el puesto correcto, porque tenemos organizaciones que preguntan poco cuales con las capacidades y los deseos del trabajador municipal”, afirmó. Esta revalorización también demanda poder escuchar y recuperar el conocimiento y la experiencia de los mandos medios y de los empleados con más años en la institución. Otros desafíos de los Municipios desarrollados por Cravacuore son la valorización equitativa de la carga impositiva en función de los costos reales de prestación de los servicios públicos; y lograr una gestión más transparente y eficiente de los recursos. En cuanto a los Concejos Deliberantes, el expositor resaltó la necesidad de que impulsen el fortalecimiento de las instituciones de la democracia representativa y realicen un mejor aprovechamiento de los instrumentos de participación ciudadana. Y propuso revalorizar la información como insumo estratégico para la gestión y su readecuación utilitaria. “No podemos operar en una realidad sino la conocemos”, afirmó el expositor. En cuanto a sus anhelos sobre el funcionamiento del sistema de Municipios en la Argentina, Cravacuore remarcó la necesidad de la creación de un sistema de indicadores municipales que permita la toma de decisiones para lograr una mayor equidad territorial. Está información sobre las condiciones y la realidad de cada municipio permitirá “tomar decisiones objetivas”, afirmó. En este marco puso como ejemplo el caso de algunos municipios que reciben hasta 200 pesos más de presupuesto por habitantes que otros. Otras aspiraciones del expositor son la instrumentación de un sistema de redistribución de ingresos que equipare la inversión pública multinivel, un mecanismo de capacitación permanente para el personal Municipal al que tengan acceso todos los Gobiernos locales y, finalmente, un sistema de incentivos para las mejoras consistentes y sustentables de las gestiones municipales. Con respecto a estos incentivos señaló que “las asignaciones presupuestarias adicionales a los fondos de la coparticipación deben estar fuertemente atadas a resultados de gestión”. “Esto no significa un proceso solamente tecnocrático, sino un proceso de carácter político en el que los Municipios deben tener metas que deben cumplirse, y el que vaya cumpliendo las metas, por una mejora de gestión, debe ir accediendo a más recursos”, dijo. “No puede ser que los que hagan las cosas bien y los que no las hagan tan bien terminen recibiendo siempre lo mismo”, concluyó.