El conflicto por los bonos fiscales de la Promoción industrial es la principal preocupación de los industriales riojanos. En ese marco el vicepresidente de la Unión de Industrias Riojanas (UNIR), José Brizuela, remarcó la preocupación del sector de que el conflicto se continúe dilatando. “Estamos en un compás de espera de 90 días”, dijo el empresario en referencia a la resolución de la Corte Suprema de Justicia de plantear ese plazo de tiempo para que las Provincias, la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) y las empresas lleguen a un acuerdo. En el mismo sentido, el vicepresidente de UNIR consideró que “es una avance en la gestión, pero nos preocupa que no se ven los resultados positivos”. “Nos queda la duda de cómo se va a resolver este conflicto”, dijo en obvia referencia a si las empresas deberán pagar o no los 1000 millones de pesos que la AFIP les reclama en concepto de impuestos no pagados. Esta semana la prensa riojana adelantó que el Gobierno provincial quiere postergar para el próximo año el debate sobre los bonos fiscales. Fuentes oficiales confirmaron que “la intención es debatir durante el año 2013, porque se trata de un año electoral y la resolución a este conflicto es política”. En la Casa de las Tejas creen que la negociación con la Nación será más sencilla durante el año electoral, porque “la presidenta se sentará a conversa con todos los gobernadores” Sin embargo, desde la entidad de los industriales dijeron desconocer esta estrategia del Gobierno provincial. “No nos comunicaron nada de la decisión de postergar el debate para el próximo año. Para la gente que ya tiene problemas, es un problema más, una nueva incertidumbre”, consideró Brizuela. En el mismo sentido, advirtió que “hay que tener claro si la AFIP esperará hasta el próximo año” para cobrar lo que está reclamando a través de la Justicia Federal. El reclamo de la AFIP a las empresas promocionadas tiene que ver con la implementación del sistema de bonos fiscales, que regulaba que debían pagarse sin tener en cuenta la devaluación de la moneda. Las empresas fueron ante la Justicia y obtuvieron un fallo favorable, pero luego en las diferentes apelaciones se encontraron con resoluciones encontradas. Es por ello que la AFIP reclama 1000 millones de pesos de impuestos que los empresarios no pagaron, por considerar que debían actualizar los bonos tomando en cuenta la devaluación de la moneda que se concretó después del año 2002 en la República Argentina. No hay problemas con las importaciones industriales La prensa consultó al vicepresidente de la Unión de Industrias Riojanas (UNIR), José Brizuela, sobre la situación de las importaciones, ya que la semana pasada la Unión de Industrias Argentinas (UIA) denunció ante la prensa nacional que los problemas con las importaciones en el país, provocan que algunas empresas tengan inconvenientes con el ingreso de los materiales que necesitan para producir. Brizuela destacó que no tenían conocimiento de ninguna situación de ese tipo en las industrias riojanas. “No nos comunicaron ninguno, por el momento no son problemas masivos”, remarcó el empresario ante la consulta periodística. El Gobierno nacional implementó hace un par de meses un sistema de limitación de las importaciones, buscando un equilibrio en la balanza comercial, y determinando que no se podrán realizar las importaciones si no se concretan exportaciones en el mismo monto.
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