LAS INTERNAS DEL PJ CON CANDIDATOS QUE NO SON CANDIDATOS.

El peronismo oficial pretende que Beder Herrera anuncie este viernes que es candidato en un encuentro en la Casa de Todos, aunque falta mucho. Del otro lado, miran, pero Bordagaray sería el candidato para enfrentar al bederismo en el PJ. Puy Soria quiere ir por la Capital, como Bosetti, pero no lo ningunean. En la avenida Perón pasa la vida política riojana, ya que en menos de dos cuadras, hay estados emocionales muy fuertes. En la sede del PJ, conocida por Casa de Todos, Silvia Machicote dice que desde la época de los viernes a la noche de Eduardo Menem no había tanta gente. Así el bederismo trata de impregnarle pasión a las elecciones internas convocadas para el 16 de diciembre, con agendas diarias que tienen los funcionarios provinciales, entre ellos Néstor Bosetti. A solo diez metros está una vieja casona que es el reducto del Proyecto Q, que primero fue la oficina de Armando Molina y por las noches se transforma en un laboratorio político para tratar de tomar la mejor decisión en torno a los comicios del peronismo. Y al cruzar la calle uno llega a la cuadra bosettista, en donde se imaginan a Ricardo Quintela con un ingreso triunfal a la Residencia Oficial, tras un acuerdo con el gobernador. De esa forma, se presenta el justicialismo en sus distintas vertientes que este viernes, a las 20, tendrá un convite organizado por el bederismo puro en la Casa de Todos, en la que esperan que Luis Beder Herrera anuncie que será candidato a presidente partidario, aunque tiene tiempo hasta el 16 de noviembre. Por ahora, todos afilian para que los comicios no sean un fiasco electoral por la baja asistencia de afiliados. En el PJ oficial todos los caminos conducen que Beder Herrera será el candidato a presidente del Consejo Provincial del PJ y luego poco, para no decir nada, se sabe. Se supone que los intendentes irán como candidatos del PJ de cada uno de sus departamentos para reforzar la estrategia bederista. En la Capital, quien ya dijo que quiere ser es Bosetti, pero es objetado por el propio bederismo, ya que él es del partido Acción Riojana. Siendo afiliado, hoy puede votar, pero no ser candidato, ya que debería haber estado hace dos años dentro del partido, como le sucede a la mayoría de los dirigentes bederistas, por lo menos esa es la visión de los más críticos. Y desde el primer piso del edificio de Vélez Sarsfield y San Martín surge la candidatura del secretario de Tierras, Ariel Puy Soria, para el Consejo del departamento Capital del PJ, aunque a él todos lo conocen como de Chilecito, pero su domicilio real es en el principal departamento de la provincial. Si se hiciera la vista gorda el oficialismo tendría a Bosetti y Puy Soria peleando por el mismo sillón, tras que Radio Fénix lo catalogó de “doble agente” al secretario de Tierra por su amistad con el quintelismo. En el caso de los disidentes, Quintela no ha dicho nada al respecto, pero la carta de presentación del sector de la Multisectorial dentro del PJ estaría encabezada por el intendente de Famatina, Ismael Bordagaray, quien ya anunció que darán pelea. Por eso, en la casona quintelista delinean una estrategia común para acompañar al famatinense en una puja con el propio mandatario provincial dentro del partido, luego que Bordagaray plantó banderas contra la megaminería. Un escenario interesante se podría dar ya que la interna se transformaría entre los pro y los antimineros, con un gobierno que asegura que ya es ganador por el empuje del interior, pero primero a los votos hay que contarlos. Por eso, cuando se habla de un ingreso triunfal de Quintela al despacho gubernamental se ve un acuerdo encubierto entre el bederismo y el quintelismo, que luego llevaría al reconocimiento de los PIL y un proyecto de ley de coparticipación municipal para ir rumbo al 16 de diciembre. Arriesga la jugada porque dentro del gobierno genera recelos estar a favor o en contra respectivamente de un entendimiento institucional entre la provincia y la Capital. Pero muchos dicen que así no se puede seguir y todo dependerá de la voluntad política de Beder Herrera y Quintela, que han coincidido desde el miércoles en la Capital Federal. Por eso hay que estar muy atentos a los movimientos de los sectores en pugna y como reaccionan los aliados. Lo cierto a esta hora que nada está cerrado, pero las mateadas y las cenas ya son comunes entre los bederistas y quintelistas que buscan que se fume la pipa de la paz.