EL BEDERISMO BUSCA EN CAPITAL NEUTRALIZAR EL CORTE DE BOLETAS.

Sergio Casas y Ariel Puy Soria se reunieron con distintos dirigentes para organizar el trabajo territorial y para aceitar los engranajes de cara al próximo 29 de mayo. El objetivo es instruir a la dirigencia para neutralizar el corte de boleta que promueven desde el mazismo. En un intento de polarizar Maza salió en algunos departamentos sin candidatos a intendentes apostando a un corte de boleta significativo en beneficio de su proyecto. El jede de campaña del Frente Justicialista para la Victoria, Ariel Puy Soria junto al candidato a vice gobernador Sergio Casas se reunieron con la dirigencia para organizar el trabajo territorial y para aceitar los engranajes de cara al próximo 29 de mayo, el objetivo  es instruir a la dirigencia para  neutralizar el corte de boleta que promueven desde el mazismo.  El ex gobernador propicia lo que en 2005 denunció. El encuentro “se dio en el marco del trabajo que se viene desarrollando de cara a las elecciones del 29 de mayo”. Los funcionarios tienen una apretada agenda de reuniones con la dirigencia con el fin de proponer alternativas de trabajo en los distintos sectores de la ciudad. La actividad es intensa se tiene planeado realizan reuniones con los equipos de militancia de los barrios, con la finalidad de organizar el trabajo territorial. Puy Soria y Casas también participaron de reuniones con los distintos partidos que llevan a la fórmula Beder-Casas para acordar estrategias de trabajo y  coordinar  la parte operativa con los distintos  grupos. Se conoció que además ambos funcionarios tienen como objetivo instruir a la dirigencia para neutralizar el corte de boleta que promueven desde el mazismo. En un intento de polarizar el candidato Ángel Maza salió en algunos departamentos sin candidatos a intendentes apostando a un corte de boleta significativo en beneficio de su proyecto. El ex gobernador propicia lo que años atrás denunciaba. En 2005 Maza denunció a Ricardo Quintela de propiciar un corte de boletas para perjudicar la candidatura del gobernador Ángel Maza en favor del ex presidente Carlos Menem. En esa oportunidad  el mazismo perdió en capital en el estamento a senador, pero ganó en el estamento de diputados provinciales, donde consagró al sublema que encabezó Teresita Luna junto a los quintelistas Ramón Vera y Jorge Machicote. El Frente para la Victoria, en capital y para diputados locales, obtuvo 38 mil votos. El justicialismo (menemistas) alcanzó los 21 mil votos. La diferencia fue de 17 mil votos a favor del mazismo y sus aliados. Sin embargo, ese resultado no se trasladó al estamento de senadores nacionales. Allí el menemismo cosechó 34 mil votos (13 mil más que para los cargos provinciales) y el mazismo alcanzó a casi 30 mil sufragios (8 mil menos que en el estamento provincial). De allí se agarra el oficialismo para acusar al quintelismo de haberle pedido a sus votantes que corten boleta a favor de Carlos Menem. Es que el sublema mazista que mayor cantidad de votos logró en los comicios fue el encabezado por Teresita Luna y el quintelismo. Los quintelistas estaban “enojados” con Maza porque el gobernador volcó gran parte del aparato estatal y fondos a favor del sublema que encabezó el ministro Jorge Bengolea. Los mismos actores, la misma alianza del intendente quintelismo, la misma estrategia pero en esta oportunidad con otra víctima. Lo de que “todo vuelve” es cierto y el paradigma de lo retro no tiene por qué escapar a la política.