El presidente de la Asociación Argentina de Sommeliers, Andrés Rosberg, jurado del “X Concurso Internacional de Vinos y Bebidas Espirituosas de Origen Vínico – Vinandino 2011”, que se realizó el pasado 10 de septiembre por primera vez en la ciudad de Chilecito, La Rioja, remarcó la calidad del vino riojano, destacando el torrontés. Además subrayó la organización del evento que por primera vez visita tierras riojanas. “El vino riojano no tiene nada que probar, todos estamos de acuerdo en que es un vino que tiene mucho potencial”, aseguró el presidente de la Asociación Argentina de Sommeliers, Andrés Rosberg, quien formó parte del jurado de Vinandino 2011. Además, subrayó el valor que tiene la presencia cada vez mayor de vinos de La Rioja en estos concursos internacionales que significan una vidriera para el mundo. “Estamos viendo cada vez más vinos riojanos accediendo a estos concursos y llegar a finales”, destacó. De este modo, aseguró que “nadie pone en dudas la enorme calidad del vino riojano, empezando por el torrontés riojano que se ganó un lugar en el corazón de todos”. Rosberg, jurado de Vinandino desde el 2007, evaluó a este concurso internacional como “el más importante de Sudamérica”, ya que es “el único abalado por la Organización Internacional de la Viña y el Vino, tenemos una cantidad muy importante de muestras, y contamos con un listado de jurados que viene de cada rincón del mundo”. Así también, el presidente de la Asociación Argentina de Sommeliers, consideró que “es fantástico poder venir a Chilecito y que los jurados conozcan otras provincias del país”, impulsando de este modo el turismo del interior de la Argentina. Finalmente, felicitó la organización del evento por el “enorme despliegue”. “Catamos con unas condiciones perfectas, las copas apropiadas, la temperatura correcta de los vinos”, destacó, a la vez que evaluó que “el servicio fue impecable”.
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