FARMACÉUTICOS RECLAMARON A LA APOS QUE ABONE "URGENTE" PRESTACIONES ATRASADAS.

Propietarios de farmacias y prestadores del servicio farmacéutico a los afiliados del APOS, solicitaron mediante nota al administrador de la obra social provincial Emilio Castro, que en forma –urgente- regularice los pagos de prestaciones adeudadas desde setiembre de 2012 a la fecha.La nota ingresó al administrador de APOS Emilio Castro el miércoles pasado, a través de la secretaria privada y fue firmada por una veintena de propietarios de farmacias de esta capital.Los firmantes en diálogo con este matutino, comentaron que esta difícil situación que atraviesan “no es desconocida por las autoridades de APOS”.Dieron cuenta que el “gran atraso producido y los constantes aumentos del precio de los medicamentos, de las exigencias de pago de los proveedores, también de los permanentes ajustes en los sueldos y cargas sociales del personal, genera honda preocupación en el sector, no por falta de paciencia (que creemos que nos sobra) sino por la insolvencia y la limitación del crédito de los proveedores por no dar cumplimiento a nuestros pagos en tiempo y forma”.Los prestadores solicitaron “en forma urgente, la regularización de los pagos por prestación de nuestros servicios y el respeto de los términos de los contratos suscriptos con la obra social ya que la retención del 10% sobre el total de la facturación, aparte del 3% de gastos administrativos es una pauta que la fijaron la APOS por un compromiso contractural de pronto pago, que no se cumple, por lo que en esta situación no debería realizarse tal retención”. Insistieron en que esta situación de atraso les trae numerosos inconvenientes porque se altera la cadena de pago, por ejemplo “los sueldos del personal de las farmacias están siendo abonados en cuenta gotas y también a las droguerías que ponen como límite abonar a la semana siguiente de entregado el pedido, no financian y generalmente se trabaja con dos o tres, entonces se llega al tope en una y sigue con la otra”. Finalmente reclamaron “reglas del juego justas, que nos dejen trabajar bien y a todos”.