miércoles, 17 de diciembre de 2008

LA UNIÓN DE GREMIOS ESTATALES SE DILUYE Y POTENCIAN A LA CTA ANTE EL ACERCAMIENTO DE SALCEDO CON EL GOBIERNO.

Los gremios riojanos están peleados y divididos en grupos que luchan por sumarse o distanciarse del gobierno local, según sus pretensiones y "necesidades". Recientemente, un sector de sindicatos disidentes habían fromado la Unión de Gremios Estatales (UGE). La encabezaban el Sitrapp, de Carlos Laciar, y el sindicato de trabajadores de la obra social Apos, Fernando Salcedo. Pero luego, Salcedo volvió a acercarse al gobierno a partir de la visita de la presidente Cristina Kirchner y, entonces, la UGE empezó a diluirse. Encima, hubo gremios que no salieron a reprocharle al Ejecutivo la detención del municipal Carlos Del Giorno y eso provocó un mayor distanciamiento. Así las cosas, el Sitrapp, junto a los judiciales, AMP y otros sindicatos menores se resguardaron dentro de la Central de Trabajadores Argentinos (CTA), que a impulso del docente Rogelio De Leonardi recobró energías en las últimas semanas. Ese sector, especialmente Sitrapp y Judiciales, no descarta marchar cuando llegue Cristina pero no para apoyar a la Presidente sino para reclamar mejoras salariales. En cambio, el sector de Salcedo se sumó al gobierno y, aunque molestando a la CGT oficial de Jorge Reynoso, aportará gente al acto que presidirá Cristina en el Centro Administrativo Provincial, el viernes. Como siempre, el sindicalismo riojano aparece confrontando permanente en su interna y cambiando sus posicionamientos para con el gobierno.

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