"La olivicultura es un sector que hoy tiene serios problemas. Estamos frente a un problema coyuntural ya que las fuertes subas de los costos de producción le sacan rentabilidad a los productores", afirmó Osvaldo Barros, presidente de la Cámara Olivícola Riojana, al conmemorarse este domingo el Día Nacional de la Olivicultura. Barros subrayó que, además de la crisis interna, el sector ahora está padeciendo también los efectos de la crisis económica internacional. "Hoy tenemos serios problemas de rentabilidad. Los precios se fijan a nivel internacional y desde 2003 los precios se han mantenido o han bajado. Además, la crisis ha provocado una caída en la demanda internacional. Todo esto hace insostenible la situación", dijo el empresario. En este contexto, el titular de la Cámara Olivícola de La Rioja destacó que los más afectados son quienes se dedican a la producción de aceite. "Los que producen aceitunas también sufren la situación, aunque en menor medida. Hoy el precio de la aceituna es de 0,45 u$s el kilo cuando en 2008 rondaba entre 0,65 o 0,70 u$s", se lamentó. Barros atribuyó la situación que vive la olivicultura por los fuertes aumentos en los costos. En este sentido, mencionó que desde 2003 hasta la actualidad ha aumentado un 250 por ciento el costo de la energía eléctrica. "Además, aquellos productores que utilizan más de 300 kw deben pagar un plus si su consumo es superior al que tenían en el año 2005", añadió. El empresario también indicó que la mano de obra aumentó desde 2003 más de un 200 por ciento y que los fertilizantes también sufrieron un incremento similar. Ante este panorama, Barros consideró que a nivel interno se hace necesario que el Gobierno Nacional tome una serie de medidas para revertir la situación. "Este es un problema coyuntural y el cambio tiene que venir por el lado de la implementación de un objetivo nacional de producción, frenar la inflación y contar con un dólar más competitivo", analizó. Sobre este último punto, Barros consideró que la moneda norteamericana debe ubicarse por encima de los cuatro pesos. "El dólar debe tener una movilidad acorde al ritmo económico que vive el país. No puede ser que desde 2003 los costos de mano de obra hayan aumentado un 200 por ciento mientras que en ese lapso el dólar sólo se movió un 20 por ciento", señaló. De todos modos, el empresario se mostró esperanzado en que se pueda revertir la situación del sector. "Creemos que esto tiene que cambiar. Somos optimistas. Y lo más importante es tener en cuenta que La Rioja es hoy la mayor productora de aceitunas de mesa del país. Somos el motor del sector, estamos muy bien posicionados y esperamos que todo se resuelva", concluyó.
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