Ana Alfonso, psicopedagoga e integrante del CIAPEM (Centro de Investigación y Asistencia a la Problemática de la Escuela Media), aseguró que el elevado índice de deserción escolar en las escuelas secundarias de la Provincia es un dato preocupante.Tras años de trabajo, esta área identificó también que el rédito económico y la posición social de los estudiantes riojanos pesan fuerte a la hora de tomar una decisión a la hora de culminar sus estudios y al elegir nuevas carreras para continuar en la universidad. En este sentido, Alfonso comentó que “los alumnos pierden el sentido del para qué seguir estudiando, por lo que se intenta a través de este proyecto rescatar su vocación, comprender por qué es importante la secundaria como un paso previo a otra carrera, porque nuestro trabajo no sólo es orientación vocacional sino también ocupacional porque hay jóvenes que tienen la firme decisión de no continuar estudiando pero quieren trabajar”, relató. Igualmente, la psicopedagoga resaltó que “nuestro primer objetivo es que sigan estudiando, pero si hay una decisión de que quieren trabajar pero no saben en qué ramas pueden ocuparse, se los pueda orientar en esa búsqueda laboral”.
INICIOS DEL PROYECTO
Al respecto, Juana Martínez, psicopedagoga e integrante también del proyecto, explicó que “pertenecemos a la dirección del Nivel Secundario y dentro de eso estamos en un equipo técnico del CIAPEM, el cual se encarga de trabajar con los adolescentes de las escuelas secundarias tratando de cubrir las demandas de las problemáticas socioeducativas, que impactan en la trayectoria escolar del alumno”. Además, reveló que “en el año 2010 surge la inquietud al ver la necesidad que al culminar la escolaridad, los alumnos no tenían en claro una orientación para dónde continuar, por lo que surge este proyecto de Orientación Vocacional y ofrecerla para las escuelas secundarias”.
MODALIDAD DEL PROYECTO
En cuanto a la característica del trabajo de Orientación Vocacional, Silvina Moreno, licenciada en Terapia Ocupacional e integrante también del equipo, subrayó que “nosotros trabajamos con alumnos de escuelas secundarias tanto públicas como privadas y lo realizamos en dos modalidades en la Unidad de Capacitación del Estado (ex Doca) en horarios de mañana y tarde, en contraturno para que los estudiantes puedan asistir sin faltar a sus clases”. Asimismo destacó que “trabajamos con escuelas que por la distancia nos solicitan el proyecto y demandan este equipo por lo que asistimos al colegio, es decir que tenemos dos modalidades de intervención”. Al ser consultadas sobre si un alumno de quinto año tiene definido qué carrera estudiar, Alfonso aclaró que “se presentan distintas situaciones, hay casos en el que el joven tiene una idea de lo que le gustaría continuar, hay otros que tienen una idea entre una carrera y otra que pueden tener relación o no y hay también quienes no tienen idea qué camino seguir en el estudio”. “Hay estudiantes que vienen con la seguridad de estudiar medicina y quieren saber si efectivamente están orientados en esa carrera, es decir que vienen a confirmar esa elección, por eso decimos que cada caso es distinto y lo trabajamos en una modalidad grupal porque consideramos que el grupo tiene una riqueza particular en la de compartir con el otro una realidad parecida, lo cual simplifica las cosas”, detalló la profesional. La especialista, afirmó que el trabajo realizado en contraturno es el ideal porque es donde el adolescente decide ir a ser orientado. “No es lo mismo que el equipo llegue a la escuela es decir que sea impuesto a que el joven decida por el mismo ir y tomar el proceso”, indicó Alfonso.“La modalidad ideal es ésta, donde el deseo de realizar esta orientación está presente, porque cuando vamos a las escuelas muchas veces se nota que ciertos alumnos no tienen ningún interés sobre esta propuesta”. Por otra parte, Martínez sumó que “hay que tener en cuenta que muchas veces el alumno ya viene con un idea pero no es de ellos, sino que es un mandato familiar o precondicionados con algunas carreras que son legitimadas por los padres que normalmente son las carreras tradicionales tales como Medicina, Arquitectura, Abogacía, Contador Público entre otros, es decir algo que les dé dinero”.“Últimamente se dan casos en que los alumnos dejan la universidad o se cambian de carrera, a veces los padres ponemos las expectativas de que inician en una carrera y lo cierto que pasan dos o tres años cambiándose de carrera hasta que finalmente encuentren la correcta”, especificó la Psicopedagoga.
PRONTA SALIDA LABORAL
En cuanto a la elección de carreras, Moreno remarcó que “cuando vamos a las escuelas se plantea esta situación de que lo que necesitan es la pronta salida laboral, y eso por lo general, lo aseguran estas carreras tradicionales como las carreras de la fuerza de seguridad, es decir Policía, otras carreras que tienen que ver con la educación, como docentes de enseñanza primaria y del Nivel Inicial”. Además, agregó que “también hemos visto que en la ciencia de la salud se elige mucho Enfermería, estas observaciones se dan en el marco de las visitas que realizamos a las escuelas, ahora cuando los alumnos van a la unidad de capacitación, el panorama es más diverso, muchos se inclinan más por carreras artísticas, tales como danza, locución, o carreras que se ofrecen en la Universidad, es decir que hay una abanico más amplio”. “Cuando el joven decide trabajar porque tiene que ayudar en su casa, o porque es el papá o mamá, también se plantea que se incorporen en los centros de capacitación laboral en donde en tres o seis meses pueden comenzar a trabajar pero también les advertimos que hay institutos que lucran con esta necesidad y crean expectativas, hay que saber que los títulos que se entreguen tengan el aval en el Ministerio de Trabajo y que les asegure la salida laboral”, informó la Terapista.
UNIVERSIDAD O INSTITUTOS TERCIARIOS
Con respecto a los lugares de estudio, Alfonso aclaró que “hay una estigmatización por la universidad como espacio de estudio, que los adolescentes se autoimponen como algo imposible, es un prejuicio y es eso lo que tratamos de romper”. El proceso que se realiza a través de la orientación vocacional consiste en dos partes: “la primera tiene que ver con una reflexión personal acerca de cuál es la vocación del alumno teniendo en cuenta que esto no viene de los genes sino que se construye con diferentes identificaciones que fueron transcurriendo a lo largo de su vida, y a través de esta exploración buscan romper con ideas preconcebidas ligadas a una clase social o profesión familiar”, puntualizó Alfonso. De acuerdo con la segunda parte, la psicopedagoga expresó que “la misma tiene que ver con la parte informativa, que es más específica hacia las áreas de conocimiento que ellos van eligiendo, para eso se aplican técnicas, pruebas proyectivas, cuestionarios para llegar al resultado”.
NUEVAS METAS
Cabe destacar que este equipo de CIAPEM, es interdisciplinario, es decir que comprende áreas de Psicología, Psicopedagogos, Trabajadores Sociales, Educación Especial, Orientación Vocacional y Medición Escolar (trabajan casos de violencia y convivencia) y cada espacio tiene delimitado sus funciones. De esta manera, informaron que desde el área de Orientación Vocacional se está trabajando en un nuevo proyecto. “El mismo tiene que ver con hacer una encuesta en 5to y 6to año, teniendo en cuenta que las escuelas técnicas tienen este curso, sobre las elecciones vocacionales para dar un registro de estadísticas, que se vea reflejado nuestro trabajo en cuestiones de números para poder reflexionar sobre la práctica misma y observar qué impacto tiene la orientación vocacional en la escuela y en el sistema”, manifestó Moreno.
PROCESO DE REORIENTACIÓN
Las profesionales se refirieron a este proceso al destacar que hubo casos de alumnos que iniciaron el mismo por haber elegido carreras que no eran las que querían continuar. “Trabajamos con una población de los 16 a los 24 años, pero hemos tenido casos de chicos que ya están fuera de la escuela secundaria y plantearon este proceso por elegir una carrera que no era, por ejemplo hay una mujer de 44 años que había terminado la secundaria a través del plan Fines que quería seguir estudiando, y se hizo la excepción en estos casos”, aseguró Alfonso. “Esto también es un gran logro para nosotros, porque apostamos a este deseo que tienen muchos de continuar sin importar la edad, lo cual nos impulsa a darle sentido a la vida”, definió Moreno. Al finalizar, Martínez brindó detalles de este equipo y comunicó que “tienen que llegarse al Centro Administrativo que se encuentra en la Av. Ortiz de Ocampo en el sector del Ministerio de Educación CIAPEM de 8:30 a 12 y de 15 a 18, allí se receptan las inscripciones, las cuales tiene cupos limitados pero se realizan en diversos grupos continuos durante todo el año y es totalmente gratuito”, concluyó.
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