El ministro de Defensa de la Nación, Arturo Puricelli verificó este lunes el simulacro de un Operativo de Protección Civil ante una catástrofe originada por un terremoto. El operativo se denominó “Diaguita” y fue coordinado por la Guarnición del Ejército Argentino con asiento en nuestra ciudad. La actividad contó con la participación de la Policía Federal, la Policía Provincial y distintos organismos Provinciales vinculados con la defensa civil. El funcionario nacional llegó al aeropuerto local acompañado por el jefe del Estado Mayor del Ejército, Teniente General, Luís Pozzi y fue recibido por el vicepresidente primero de la Cámara de Diputados, Sergio Casas, el ministro de Gobierno, Felipe Álvarez y el director general de Defensa Civil, Fabián Tapia, entre otras autoridades. Luego se dirigieron a la Guarnición La Rioja donde su jefe, el coronel Adriel Svars los interiorizó sobre los objetivos, fases, actividades y alcances del ejercicio de simulacro. Junto a Puricelli y Pozzi estuvieron otros responsables de la V Brigada de Montaña con asiento en Salta y de la II División del Ejército de Córdoba. También se encontraban presentes el ministro de Salud, Juan Carlos Vergara y el secretario de Ambiente Nito Brizuela. En la oportunidad, el diputado Casas explicó que este tipo de actividades “permite interactuar, tener información y lograr que en caso de producirse el desastre afecte de la menor forma posible a la población”. El legislador también destacó que el ejercicio pudo ser observado desde las escuelas primarias y secundarias a través de cámaras colocadas en el Centro de Operaciones de Emergencias (COE) y mediante el servicio de Internet para Todos. El operativo consistió en la organización de recursos humanos y técnicos destinados a la protección de la población ante la posibilidad de que se registre un terremoto de 7,1 grados en la escala de Richter, con epicentro a unos 10 kilómetros al oeste de nuestra Capital. El simulacro contempló la eventualidad de que el movimiento sísmico provoque una fisura en el paredón del Dique Los Sauces y la consecuente inundación de las zonas urbanas cercanas. Ante este cuadro de situación, el Ejército elaboró un plan de operaciones que contempló la instalación de un COE que funcionará en las instalaciones de la Guarnición La Rioja desde donde se coordinaría un operativo de esta naturaleza. El ejercicio contempló la instalación de un Centro de Evacuados y las tareas de reestablecimiento de la transitabilidad de calles y vías de acceso a la zona afectada a partir del trabajo de la Compañía de Ingenieros en Construcciones con asiento en la Guarnición La Rioja. También se organizó un sitio de evacuación aérea y actividades de búsqueda y rescate de heridos atrapados en los derrumbes y de captación y potabilización del agua. El ejercicio incluyó el establecimiento de mecanismos de comunicación rápidos y eficientes entre el área del desastre y el COE, contemplando un Centro de transmisión ubicado en las zonas montañosas que circundan el Dique. Además de estos destrozos en el dique y una eventual inundación en las zonas cercanas, el simulacro también previó posibles derrumbes de edificios históricos y viviendas precarias en distintos puntos de la ciudad y daños de distinta consideración a la población civil. El ejercicio apuntó a actualizar el protocolo y los procedimientos necesarios para actuar ante este tipo de catástrofes y estimar los recursos necesarios para trabajar en forma rápida y eficiente. En el Regimiento, Puricelli fue interiorizado sobre un moderno y eficiente sistema de información digital montado por el ejército que permite monitorear la situación y distribuir los recursos en forma adecuada.
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