martes, 29 de octubre de 2013

LOS NÚMEROS QUE DEJARON LA ELECCION LEGISLATIVA PROVINCIAL.

En la Cámara de Diputados a nivel nacional se renovaban dos bancas, las de los legisladores Julio Martínez y Jorge Yoma. Precisamente, el primero de ellos, logró retener su puesto al salir segundo en estas elecciones generales del domingo 27 como representante de Fuerza Cívica Riojana, detrás de la ganadora del Frente para la Victoria, Teresita Madera. De ocho escaños en Capital, cuatro quedaron en manos de la oposición. En toda la provincia se presentaron en total 60 listas oficializadas para 18 escaños: 26 por Capital con 338 candidatos que pugnaron por las 8 bancas en juego y 34 en el interior, lo que totalizaron 459 candidatos entre titulares y suplentes. Dentro de las listas de Capital, hubo 15 que llevaron como cabeza de lista para diputados nacionales a la fórmula Teresita Madera y Felipe Alvarez por el Frente para la Victoria; cuatro que impulsaron la candidatura de Julio Martínez y Clara Vega de Fuerza Cívica Riojana; y dos de Nuevo Pacto Federal que proponía a Jorge Yoma y Judit Díaz Bazán. Este no es un dato menor al momento de analizar el resultado de las elecciones del pasado domingo, cuando el binomio oficialista Madera- Alvarez se alzó con una ajustada victoria en toda la provincia sobre sus principales contrincantes Martínez-Vega, y que logró revertir los resultados alcanzados en las elecciones Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) del 11 de agosto. En aquella oportunidad, Julio Martínez y Clara Vega se habían impuesto a nivel provincial con una diferencia porcentual del 3,61 puntos luego de posicionarse en departamentos clave como Capital, Chamical y Chilecito y de alcanzar 73.172 votos frente a 66.744 de Madera y Alvarez a quienes no les había alcanzado con ganar en 13 jurisdicciones. Anteayer, según datos de la Dirección Nacional Electoral, el Frente para la Victoria logró 85.898 votos (47,05 por ciento) sobre 84.902 (46,50 por ciento) de la Fuerza Cívica Riojana, teniendo en cuenta el escrutinio de 818 mesas de un total de 837. Es decir, que la diferencia con relación a las elecciones de agosto, fue de apenas 996 votos a pesar de la cantidad de colectoras que respondían al oficialismo y que debían contribuir a sumar votos para los diputados nacionales. En el caso de los distritos más representativos de la provincia, se mantuvo la tendencia en Capital aunque en otros se achicó la diferencia. En Capital, la dupla de Fuerza Cívica Riojana había obtenido en agosto 40.509 votos frente a 30.377 para la del Frente para la Victoria, una diferencia de más de 10 votos. En esta oportunidad, la fórmula de Martínez logró agrandar la brecha al imponerse por una diferencia de más de 13 mil votos, ya que 48.491 capitalinos prefirieron a este candidato por sobre Madera que alcanzó 35.286 votos. Se podría inferir que en el distrito más grande y que mayor cantidad de votos tiene, no sólo no alcanzó el aporte de las 15 colectoras oficialistas sino que además en el resultado pudo haber influenciado el guiño político del actual intendente, Ricardo Quintela, para con los referentes de Fuerza Cívica. En el caso de Chilecito, de donde es oriundo Julio Martínez, el domingo, su lista logró posicionarse con 13.315 votos sobre 11.710 del Frente para la Victoria. Los resultados, en agosto habían dado ganador al chileciteño por 12.446 votos contra 9.213 para Madera. Con esto, se analiza que si bien, el triunfo continuó en manos de la oposición, lo hizo por una diferencia menor de votos: de 3.233 pasó a 1.605. En Chamical, Fuerza Cívica Riojana había ganado en agosto por 4.052 votos contra 2.590 del Frente para la Victoria, es decir, una diferencia de 1.462 votos; en tanto que el pasado domingo, nuevamente lograron imponerse pero esta vez por 4.285 sufragios sobre 3.963, una diferencia de apenas 322 votos. Así también, en otros departamentos en los que la fórmula Madera-Alvarez se había impuesto a la de Martínez-Vega, la diferencia se agrandó volcando más votos para los candidatos del oficialismo. Entre otros, se puede citar a Rosario Vera Peñaloza, cuya cabecera es Chepes, donde el Frente para la Victoria amplió su triunfo de las PASO por sobre Fuerza Cívica Riojana: de un 25,93 por ciento de votos pasó a un 45,16. Fue precisamente en el interior donde el Frente para la Victoria logró capitalizar nuevos sufragios, casi de uno en uno, y lograr de esa manera, revertir los resultados de las PASO y mantener a raya la amplia diferencia obtenida por los candidatos de Fuerza Cívica Riojana en Capital. En las elecciones de agosto pasado, el porcentaje de voto en blanco apenas superó el 2,17 por ciento en esta oportunidad casi duplicó ese porcentaje, alcanzando 8.183 votos, lo que se traduce en un 4,20 por ciento. Otra cuestión que llama la atención y que no es menor a la hora de evaluar la tendencia que se va dando al momento de sufragar, es echar una mirada a los resultados de elecciones legislativas de años anteriores donde ya se comienzan a ver las incipientes apariciones de la oposición y que van cobrando fuerza en el electorado riojano. Algo que no deja de extrañar si se considera que históricamente, La Rioja fue netamente justicialista y que fueron sus candidatos los que holgadamente se alzaban con los primeros puestos. En las elecciones legislativas provinciales de 2009, la denominada Lista de Unidad entre el bederismo, lunismo y quintelismo que se presentó por el Partido Justicialista que encabezaba Carlos Luna, obtuvo el 20,33 por ciento, seguido por el 18,48 por ciento del radicalismo. Esos porcentajes en cantidad de votos significaron 17.544 para el justicialismo y 15.946 para el radicalismo. Dos años después, ocasión en la que se elegían senadores y diputados nacionales, el Frente para la Victoria lograba 55.197 votos para posicionar a Teresita Luna en la Cámara Alta y más de 53 mil para que Javier Tineo obtenga un lugar en la Cámara Baja. La lista muleto, que impulsaba a Carlos Menem como senador y a Griselda Herrera como diputados nacionales, consiguieron alcanzar estas bancas tras obtener más de 56 mil y 42 mil votos cada uno, respectivamente. La gran sorpresa la daba la Unión Cívica Radical, que posicionaba a Julio Martínez e Inés Brizuela y Doria para senador y legislador nacional, obteniendo ambos sus escaños con más de 37 mil votos el primero y superando los 35 mil votos, su compañera de lista.

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