El ministro de Gobierno, Justicia, Seguridad y Derechos Humanos, Claudio Saúl, sentenció que observó una gran irresponsabilidad y falta de seriedad por parte del auditor General de la Nación, Leandro Despouy en el sentido de hacer una acusación tan grave al gobierno de la provincia de La Rioja, de un modo que linda prácticamente con la comisión de un delito con el supuesto desvío de fondos nacionales para la obra pública. Saúl dijo que actuar de esta manera da mucho para hablar, por el desconocimiento y la falta de información sobre esta obra en particular, que fue realizada con fondos públicos provinciales, y que de ninguna manera se usaron fondos destinados a refacción de escuelas en la obra del paseo, tal como lo acusa el auditor. “Desde el Gobierno de la Provincia de La Rioja vamos a iniciar las acciones legales correspondientes, porque nos consideramos agraviados por tamaña e irresponsable declaración, en la acusación de un delito sobre malversación de los caudales públicos”, enfatizó el ministro. En este sentido adelantó que pondrá en conocimiento del Congreso de la Nación, esta situación que “consideramos de extrema gravedad por venir de quien es el encargado de auditar los fondos públicos nacionales”. Añadió que “estas conductas las podríamos esperar quizás de un dirigente político de carácter opositor, pero vemos a las claras que esto está enmarcado dentro de una campaña de desprestigio de la oposición política al gobierno de la provincia, que la encabezan los diputados Julio Martínez e Inés Brizuela y Doria”. Por otro lado, el titular de la cartera de Gobierno indicó que el auditor también tuvo la desafortunada apreciación de hablar de represión en La Rioja comparándola con las dictaduras vividas en nuestra República Argentina. Mientras que el accionar de la Provincia fue solicitado mediante una orden judicial, estando el tema en manos de un juez a partir de las denuncias del Ministerio de Educación, supervisores y comerciantes que se vieron amenazados hasta en su integridad física, coartando sus derechos de transitar y comerciar. “Esto nada tiene que ver con lo que pasó hace años, donde el radicalismo fue un aporte esencial en el año 1955 y en el año 1976, cuando se produjeron los golpes militares a un gobierno peronista, fueron ellos quienes colaboraron en forma inmediata con los gobiernos y con la dictadura, haciendo un manto de silencio ante la desaparición de muchos hermanos producto de la represión”, recordó Saúl. Y agregó que “los allanamientos y procedimientos se hacían sin órdenes judiciales, producto de la prepotencia y del autoritarismo vivido en aquella época”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario