El ministro de Salud, Marco Perera, participó en Sanagasta del lanzamiento de la capacitación a médicos de toda la provincia para incorporarlos al sistema de registro nacional de conducir. Luego de la apertura de la capacitación, brindó una breve e impactante charla sobre las consecuencias de los accidentes viales y las pérdidas que generan en la sociedad riojana. Una fuerte y emocionante charla ofreció el ministro de Salud de la Provincia, Marco Perera, a los médicos y autoridades que participaron del lanzamiento de la capacitación de facultativos para el sistema de habilitación de carnés nacionales. El evento, organizado por la Agencia Provincial de Seguridad Vial y realizado en la bodega Miriti de la cabecera del departamento Sanagasta, sirvió para anunciar la inminente apertura en esta localidad de un centro de emisión de licencias de conducir, como puntapié inicial para la llegada de oficinas similares a toda la Provincia. Perera, invitado por las autoridades que organizaron el evento, brindó una charla sobre las causas y las gravísimas consecuencias de los accidentes de tránsito, no sólo en lo físico y lo económico para las víctimas, sino en las secuelas sociales que padece la familia de cada persona que fallece en un siniestro vial. Para iniciar su exposición, el ministro presentó un breve spot de concientización vial que muestra crudamente lo que viven las víctimas y los familiares en un hecho traumático como estos. “Siempre hemos bregado por la seguridad vial y hoy es un compromiso de trabajo que asumimos con la función”, expresó Perera, quien identifica tres costos en los accidentes de tránsito. “El costo económico, que es el menos importante. En segundo lugar el costo físico, la cantidad de vidas que se pierden en La Rioja, que equivalen a medio Cromañón por año o a una tragedia de LAPA cada 14 meses, ya que nuestra provincia encabeza los ránkings de muertes por accidentes en proporción a su población”, señaló el titular de Salud. Respecto del tercer costo de los accidentes de tránsito, dijo que es el costo social. “Los pacientes que sobreviven y quedan con secuelas físicas o psíquicas, en una sociedad excluyente y que siempre busca culpables. Yo habitualmente me saco el guardapolvo de médico, esa especie de chaleco antibalas que tenemos, pero que no nos protege contra el dolor de una familia que pierde a un ser querido. Necesitamos que ustedes, colegas y compañeros médicos, nos den una mano para frenar este flagelo”, aseguró. Finalmente, el ministro Marco Perera reconoció la importancia de esta capacitación para los profesionales de la Salud y la tarea del ministro Claudio Saúl, el director de la ASV Fernando Torres y del intendente José Aparicio para involucrarse de lleno en solucionar esta problemática tan grave que provoca más de 100 muertes por año en toda la Provincia de La Rioja.
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