UNA ENCUESTA REVELA QUE LOS RIOJANOS SE SIENTEN INSEGUROS Y DESCONFIAN DE LA JUSTICIA.

Mas del 80 por ciento de los riojanos de distintos barrios de la capital admiten sentirse inseguros en sus casas o comercios y gran parte de ellos revela que también siente temor de andar por la calle en horas de la noche, según una encuesta de opinión realizada la semana pasada por la consultora local Tendencias Argentinas. El informe fue realizado a pedido de una empresa nacional especializada en servicios de vigilancia privada e instalación de alarmas, que evalúa radicarse en la provincia, informó Tendencias Argentinas. Lo cierto es que la muestra permite notar que el 82,3 por ciento de mas de 400 riojanos encuestados en sus domicilios de unos 15 barrios, se siente inseguro. De ellos, el 45,6 por ciento afirma que "el delito está creciendo y por esa razón me siento inseguro", mientras que el 36,7 por ciento es mas radical y reconoce sentirse "totalmente inseguro y tener miedo". En cambio, solo un 15 por ciento cree vivir en una ciudad segura sin delitos o con escasa cantidad de hechos delictivos, informó Tendencias Argentinas. Paralelamente, la consultora recogió la opinión de los lectores de Riojavirtual. En la encuesta que dispuso en este portal, votaron mas de 800 riojanos, en este caso sin rigor científico. Pero los porcentajes dieron un resultado similar porque mas del 87 por ciento de los lectores admitieron sentir inseguridad en distintos grados. En el trabajo de campo hecho por Tendencias Argentinas en los barrios, los encuestados afirmaron que la inseguridad se vive tanto en domicilios particulares como en comercios, aunque admiten que los delitos que se registran no conllevan el grado de violencia que muestran otras capitales del país. "El robo o hurto a menor escala, mayormente en ausencia de los moradores de una vivienda o cuando los comercios están cerrados, parece ser el mayor temor de la gente", informó Tendencias Argentinas. Pero la consultora advirtió que "en esta oportunidad (en comparación con encuestas similares anteriores) es notable que ha crecido el temor de la gente al accionar de patotas o vándalos que deambulan en horas nocturnas por determinadas zonas y, no solo roban, sino que además agreden a vecinos y transeúntes o pretenden abusar de mujeres, especialmente jovencitas". Básicamente, el trabajo encuestal de Tendencias Argentinas demuestra que "ese temor se registra en zonas específicas de los barrios San Vicente, Cochangasta e inmediaciones, Parque Industrial e inmediaciones, Matadero, Las Ágaves y algunos sectores del Hospital, entre otros". "La opinión pública ya tiene asumido que no puede pedirle mas a la policía local. Por desconfianza hacia sus efectivos o porque entienden que la inseguridad en algunas zonas excede la labor preventiva que, de todas formas, aseguran que es escasa", subraya la consultora. Y añade que "la disconformidad de la población en general parece ahora apuntar sobre la justicia. La mayoría de los encuestados ha considerado que, aunque la policía actuase como debería, luego los jueces liberan a los delincuentes porque, además, suelen ser menores de edad". En ese punto, la consultora detectó que "mas del 90 por ciento de los entrevistados atribuye los robos y agresiones a patotas o grupos violentos integrados por jóvenes o menores de edad, que suelen estar borrachos o drogados". Un reciente informe del Ministerio de Justicia de la Nación, en base a datos suministrados por la policía local pero no difundidos en La Rioja por las autoridades de la fuerza, demostró que en los últimos meses el índice delictivo en la capital provincial continuó ascendiendo. Tendencias Argentinas le preguntó a los encuestados que admitieron tener temor y sentirse inseguros, si han comprado armas para defensa personal o si están dispuestos a hacerlo. El 92,3 por ciento de los consultados dijo no haberlas comprado y mas del 80 por ciento aseguró no estar dispuesto a hacerlo, por varias razones (las dos mas nombradas se refieren a la presencia de menores en la casa o al temor a causar daño involuntario). En cambio mas de un 15 por ciento admitió estar pensando en armarse.