Causas por montos millonarios quedarán impunes luego de que vencieran los plazos legales para que haya condena. La tramitación promedio lleva 14 años. Cada vez más causas de corrupción terminan impunes en la Argentina porque prescriben. Entre las de este año sucedió con cuatro megacausas millonarias y que involucran a ex funcionarios: Tandador, IBM-Anses, Yoma y Cirigliano. Sólo en estas cuatro causas, y sin contar los intereses a la fecha, habría una pérdida superior a los u$s 280 millones que en lo que va del año pasaron a integrar el costo impune de la corrupción. Peor aún.Según información de la ONG Asociación Civil por la Igualdad y la Justicia -que sigue los casos de corrupción- existen muchas causas importantes varias contra funcionarios de los 90 que hoy descansan en los Tribunales y están a punto de correr con esa misma suerte. En cuanto a los motivos de la prescripción, hay que buscarlos en las demoras en la tramitación que llegan a durar 14 años en promedio y porque el tiempo transcurrido desde que se inicia la investigación es superior a la pena máxima para el delito imputado. "Claramente, la cifra sigue aumentando y seguirá si no se toman medidas urgentes", explicó el Coordinador del Programa Acción Ciudadana y lucha contra la Corrupción de ACIJ, Luis Villanueva. Y añadió: “Muchas veces se piensa que el costo de la corrupción queda a nivel de conciencia, pero no se observan los millones de dólares sustraidos de las arcas estatales y el costo material y social que implican”.
Una por una:
En las causas de este año prescriptas las resoluciones que decidieron sobre ellas tiene un argumento común: la vulneración del plazo razonable. Tandanor: el grupo empresario compró en 1991 los estatales astilleros Tandanor en 60 millones de dólares, pagó sólo 7 millones y vendió parte del lote, cerca de Puerto Madero, en u$s 18 millones para desarrollar un multimillonario emprendimiento inmobiliario. Veinte años después, la causa judicial en la que se investigó la venta del astillero de la Armada quedó en la nada porque fue declarada prescripta el 23 de febrero de este año. Nadie fue condenado. Según el textual del requerimiento de instrucción: "El monto total del perjuicio ascendería a los u$s 70.000.000, dentro de los cuales se incluye el saldo impago de la deuda de 32.760.000 más sus intereses". IBM-Anses: el contrato en el que se registraron irregularidades había sido firmado (en 1994) por 60 millones de dólares y en el transcurso de la investigación el juez Jorge Urso llegó a sostener que el caso se extendería a contratos anteriores (que habían sido firmados por un total de 40 millones de pesos). Prescribió el último 11 de marzo. Yoma: se investigó durante diez años a parte de la familia Yoma y a apoderados de la empresa Yoma SA por la cesión de una serie de créditos como garantía de repago de préstamos que le otorgó el Banco Nación. En 2006 adeudaban 180 millones de pesos. Cirigliano: El empresario Claudio Cirigliano estaba procesado por haberle pagado viajes de placer a Ricardo Jaime (que debía controlar a TBA), pero el 28 de abril de 2011 la Cámara entendió que el caso prescribió por demoras en el expediente. Días atras la Justicia abrió un recurso presentado contra la decisión de la Cámara Federal de cerrar la causa. Pero aún no se expidió.
En las causas de este año prescriptas las resoluciones que decidieron sobre ellas tiene un argumento común: la vulneración del plazo razonable. Tandanor: el grupo empresario compró en 1991 los estatales astilleros Tandanor en 60 millones de dólares, pagó sólo 7 millones y vendió parte del lote, cerca de Puerto Madero, en u$s 18 millones para desarrollar un multimillonario emprendimiento inmobiliario. Veinte años después, la causa judicial en la que se investigó la venta del astillero de la Armada quedó en la nada porque fue declarada prescripta el 23 de febrero de este año. Nadie fue condenado. Según el textual del requerimiento de instrucción: "El monto total del perjuicio ascendería a los u$s 70.000.000, dentro de los cuales se incluye el saldo impago de la deuda de 32.760.000 más sus intereses". IBM-Anses: el contrato en el que se registraron irregularidades había sido firmado (en 1994) por 60 millones de dólares y en el transcurso de la investigación el juez Jorge Urso llegó a sostener que el caso se extendería a contratos anteriores (que habían sido firmados por un total de 40 millones de pesos). Prescribió el último 11 de marzo. Yoma: se investigó durante diez años a parte de la familia Yoma y a apoderados de la empresa Yoma SA por la cesión de una serie de créditos como garantía de repago de préstamos que le otorgó el Banco Nación. En 2006 adeudaban 180 millones de pesos. Cirigliano: El empresario Claudio Cirigliano estaba procesado por haberle pagado viajes de placer a Ricardo Jaime (que debía controlar a TBA), pero el 28 de abril de 2011 la Cámara entendió que el caso prescribió por demoras en el expediente. Días atras la Justicia abrió un recurso presentado contra la decisión de la Cámara Federal de cerrar la causa. Pero aún no se expidió.
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