Marcela Ledo junto a su hija Graciela continúan reclamando justicia, a 39 años del golpe cívico militar. A 39 años del último golpe cívico militar en Argentina, Marcela y Graciela Ledo recorrieron la causa que involucra al actual jefe del Ejército César Milani en la desaparición de Alberto Ledo y por la que aún no ha sido imputado. La causa por la cual el actual Gobierno nacional fue denunciado ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos por obstaculizar el derecho a la verdad y a la justicia marcó un quiebre entre los organismos defensores de DDHH. Marcela Ledo es la presidenta de Madres de Plaza de Mayo filial La Rioja, y junto a su hija Graciela llevan adelante las denuncias contra César Milani a quien consideran responsable, y con numerosas pruebas ante la Justicia, de la desaparición de Alberto Ledo en la causa que ya permitió encarcelar con prisión domiciliaria al capitán Esteban Sanguinetti. Luego de su reciente participación en Tucumán donde cerca de 3 mil personas marcharon bajo la consigna “Basta de impunidad, indagatoria a Milani ya”, y donde Graciela Ledo se reunió con representantes del Colegio de Abogados de esa provincia, que impulsa un registro de víctimas de impunidad en democracia, la hermana del desaparecido Alberto Ledo calificó como “una provocación cuando en pleno acto en Tucumán, la Presidenta lanzó una cadena nacional anunciando la entrega de más de 900 millones de pesos en equipamiento al Ejército y muestra a Milani con Rossi. “Lo veo como una provocación, Tucumán es algo emblemático, por Bussi, por el Operativo Independencia, por la cantidad de desaparecidos, estudiantes y soldados desaparecidos y porque es un lugar donde hay infinidad de casos de impunidad ahora, especialmente las chicas muertas por los políticos y la Policía”, consideró Graciela. Para referirse a las más recientes instancias de una causa judicial que estaba paralizada desde 2008 en Tucumán, madre e hija recordaron que “desde julio de 2013 empieza a aparecer Milani en la prensa y la propuesta de él como jefe del Ejército que implicaba que había que tratar los pliegos en el Senado. Había una denuncia concreta porque Milani ya estaba imputado por su participación en el Operativo Independencia”. Precisó que “gente de La Rioja que vivió la represión desde el 76 empieza a reconocerlo, entre ellos Alvaro ‘Yopo’ Illanes sale a la prensa con denuncias claves como que estuvo en el Regimiento de La Rioja, que Alberto Ledo era el asistente de Milani, que ya estaba haciendo inteligencia porque les hacía charlas a la hora de descanso y que siempre estaba preguntándoles sobre la política, sobre el peronismo, sobre los guerrilleros, especialmente a ellos dos, Alvaro era un dirigente de la juventud peronista y Alberto era un dirigente de los centros de estudiantes de Tucumán, en ese momento. Eso denuncia Yopo que tenía otros testigos que habían estado en Tucumán en contacto con Milani y Alberto”. “La prensa ha jugado un papel fundamental y lo sigue jugando en el esclarecimiento de esta causa que ha ido revirtiendo la opinión de muchos”, consideró, Graciela. Precisó que “los que no quieren aceptar que esta causa existe y que Milani es responsable, no aceptan hablar porque no tienen razones para negarlo. Acepto que como integrantes de un gobierno apoyen las acciones pero lo que no acepto es el verticalismo de tener que decir que sí a todo”. Madre e hija señalaron que “hemos conseguido muchos testigos, apareció el sumario de deserción firmado por Milani, Sanguinetti apareció en el 2013, se lo indaga, se lo procesa y se lo detiene o sea que se ubica el accionar de Sanguinetti dentro del terrorismo de Estado como se juzga los crímenes de lesa humanidad por dichos, por los relatos que hace mi madre de cómo desaparece Alberto pero además por ser el jefe del departamento en ese momento y es Sanguinetti quien ordena a Milani que haga una investigación por la ausencia de Alberto Ledo entonces Milani es quien redacta el sumario de deserción con muchísimas falencias en lo formal, lo dice Britos, hay incongruencia de fechas, de lugares y de la actuación en sí porque nunca investigó ni visitó la casa de su familia y sus amigos, no preguntó qué le había pasado porque por lo general cuando un soldado se escapaba era porque había recibido malos tratos, porque no le habían dado de comer, porque lo habían torturado”. Afirmaron que “sabemos por sus compañeros que al otro día que Alberto no está, se informa que Ledo había desaparecido, es más, lo dicen testigos de él, se da la orden de retirar el equipo de Ledo que era la mochila con todos los elementos que ellos tenían, lo mismo que dice Milani que Ledo se llevó, en el mismo sumario hay un listado de cosas que Ledo se llevó junto al precio estipulado. El acta la firma Milani, Sanguinetti y el subteniente Lotero”. Mencionaron que “en 2013 los senadores aprueban el pliego, le habíamos hecho una carta pública a la Presidenta, a los senadores y a las dos senadoras peronistas de La Rioja con toda la documentación que avalaba nuestras denuncias, lo mismo votaron a favor”. Agregaron que “el 22 de diciembre de 2014 el fiscal Britos eleva la causa al juez Daniel Bejas con la imputación de dos delitos, encubrimiento y falsedad ideológica y pide la indagatoria. Para nosotros ha sido una muy buena señal aunque habíamos pedido coautoría del asesinato. De todos modos no la cuestionamos”.Además, explicaron que después denunciaron que ha sido parcial y arbitraria porque no midió con la misma vara a Sanguinetti y a Milani. Precisaron que “al primero lo ubica dentro de un plan sistemático que fue el terrorismo de Estado. En cambio para Milani utiliza los argumentos de la ley de obediencia debida que ya fue derogada y dice que por su edad y por su bajo grado de escalafón militar no tenía la obligación de decir la verdad. Fue una resolución política más que jurídica”. Marcela Ledo puede dar fe de sus 39 años de lucha, primero en la dictadura cuando recorrió todos los lugares donde podía denunciar e incluso ante la Comisión Interamericana en 1979. “En diciembre del 2014 volvimos a denunciar ante la Comisión Interamericana de Derechos Humamos al gobierno argentino por obstaculizar el derecho a la verdad y a la justicia. Después de 39 años de lucha, de haber pasado por un gobierno militar la democracia todavía nos debe la justicia en el caso nuestro pero también en muchísimos casos de desapariciones porque los juicios por causas de lesa humanidad son infinitamente inferiores a la cantidad de desaparecidos y de violaciones a los derechos humanos. Este gobierno hizo de la defensa de los derechos humanos una bandera pero esto ha sido resultado de años de lucha, el pueblo es el que logró la derogación de leyes, no ha sido una concesión gratuita del gobierno sino resultado de años de lucha. En 2015 el juez Bejas toma la ley de obediencia debida para justificar la no indagatoria de Milani”. Para finalizar, Graciela Ledo, remarcó el quiebre entre los organismos de derechos humanos a raíz de las denuncias contra Milani, “hay organismos que se han mantenido independientes y que en este momento están fortalecidos en la lucha, algunas Madres de la Línea Fundadora nos acompañan al igual que la Asociación de ex detenidos desaparecidos, entre otras.La Liga por los derechos del hombre y la Asamblea permanente por los derechos del hombre han aportado muchos elementos de su archivo para la causa. Aparte del desprestigio que tienen Hebe de Bonafini y Estela de Carlotto que han contribuido a ese quiebre de los organismos de derechos humanos. Hemos ido encontrando muchas organizaciones de derechos humanos, estudiantiles y políticas, solidarizadas con nuestra lucha. Otra vez la lucha en la calle tiene que tener éxito”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario