Mientras los facultativos del hospital zonal Luis Agote de Chamical, reclaman por mejores condiciones laborales, la comunidad se expresó en contra al advertirles que “renuncien todos” por las falencias en la atención que se brinda. Hace pocos días murió una joven por presunta mala praxis. Anoche, los profesionales médicos y parte del personal del nosocomio de Chamical, se reunieron con el secretario general de ATSA, Nicolás de la Fuente, a quien le plantearon la situación del “Luis Agote”. Mientras tanto, las fuertes críticas de la comunidad que se hacen escuchar a través de los medios de comunicación, encendieron una vez más la luz de alerta en los encargados de los servicios que se prestan en el hospital, aunque no así en los directivos del nosocomio que no participaron de la reunión mantenida anoche. “Que renuncien todos”, fue la frase disparada por la comunidad que no ve ninguna solución a los reclamos que a diario se suceden en el nosocomio por la atención médica. La crisis por la que atraviesa la entidad, volvió a quedar en el tapete y en la opinión pública luego del fallecimiento de una joven la semana última, cuando era trasladada hacia la ciudad capital, y por el cual su madre denunció penalmente a facultativos por presunta mala praxis. Sin embargo, son los médicos los que solicitaron al gremio que se gestione ante las autoridades ministeriales. “Estamos solos, nadie nos escucha, trabajamos como en una isla, tocamos fondo y no sabemos qué hacer”, dijo la médica Mariela Nievas, quien expuso junto al anestesista Elías Luna la situación del hospital local.Sobre el particular, Luna dijo que “nos asemejamos más a un centro primario de salud, que a un hospital regional, nosotros ponemos la cara todos los días porque los responsables de que esto funcione bien nunca vienen”, precisó.En otro orden, se quejaron alternativamente también los empleados de limpieza, de administración, de mantenimiento de las unidades de derivación señalando que “nunca hay plata para comprar un repuesto, quedan las ambulancias tiradas porque no tienen plata, o no hacen las gestiones que se deben hacer”. Agregaron “No solo no hay recursos humanos, tampoco insumos, no hay ni para comprar guantes de limpieza, fósforos para la cocina, ni secadores de pisos que lo traen de su casa las empleadas, sino que también falta hasta comida para los internos”, manifestaron. Por su parte, Nicolás de la Fuente ofreció intermediar ante la situación, pero mientras tanto anunció que desde el gremio se enviarán técnicos para realizar un “diagnóstico general” de la situación. En ese contexto dijo además que lo que está “fallando es la cabeza, y cuando pasa eso los que pagan son los pies, a eso lo sabemos todos, pero tenemos que estar unidos ahora más que nunca para ir saliendo de la crisis, analizar lo que hacemos bien y lo que hacemos mal” indicó. Las críticas de los distintos sectores del hospital hicieron centro en la directora zonal y del hospital, Olga de Vanzetti, quien ocupa ambos cargos desde la renuncia presentada por la doctora Fernanda Argüello, ocurrida cuatro meses atrás. El ministro de Salud de la Provincia, Elio Díaz Moreno, confirmó que conoce la situación a través de la directora de la Zona Sanitaria de Chamical y que está dispuesto a recibirla, junto a los profesionales, para analizar la situación. Entendió el funcionario, que se deben escuchar todas las voces para lograr una solución a un evidente conflicto de partes, entre la comunidad y los médicos. No descartó que el encuentro con los médicos pueda realizar hoy o mañana, porque entendió que se trata de un problema que debe enmendarse de forma inmediata.
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