En el marco de las distintas aristas que contempla el trabajo del Comité de la región Atacalar, mucho se ha avanzado en diferentes espacios ligados con la producción, el comercio y la integración socio cultural de las dos naciones, que con sus regiones respectivas, trabajan en ese marco. En el caso puntual de la minería, la última reunión celebrada en la Provincia de Tucumán, sirvió para poner en claro cuál es la posición pro desarrollista en materia minera, merced a la oportunidad que representa la actividad para una región con amplísimo potencial en la materia. De esta manera, la Comisión de Minería y Ambiente, presidida por el subsecretario de Medio Ambiente de Tucumán, destacó los trabajos de infraestructura que se llevan a cabo desde las administraciones de ambos países, Argentina y Chile, que permitirán dotar de las instalaciones necesarias para materializar las respuestas a la demanda que impone Atacalar, en una fuerte apuesta a futuro de la macro zona y concretos beneficios para la región de Atacama y las provincias argentinas involucradas en el Comité. Estos pasos relacionados directamente con la integración total del territorio, tuvieron su repique en todas las áreas de trabajo, más en lo que a desarrollo minero se refiere, un fuerte posicionamiento surgió de las 5 provincias que conforman Atacalar, junto a la Región de Atacama; esto es impulsar la derogación de las leyes que impiden la actividad metalífera a cielo abierto, tomando como ejemplo la Provincia de la Rioja, que a través de esta política de Estado, promueve el desarrollo productivo – económico y social de un territorio con inmensas posibilidades de progreso. Atendiendo a esta premisa, la decisión tomada tiene que ver con la contundente realidad expresada en números de puestos de trabajo generados por la minería, en la significancia que este tópico imprime a la producción general del territorio y el impacto en futuras generaciones con mayores posibilidades de desarrollo y educación. En su historia, la minería ha demostrado claramente que genera igualdad de oportunidades para las zonas más alejadas de los principales centros industriales, en las que muchas veces no existe una infraestructura básica, servicios, mano de obra calificada, profesionales, caminos, vías de comunicación, y en las que la actividad minera se compromete fuertemente con las sociedades donde se instala ya que, previo a producir, realiza inversiones para acondicionar la región. El Comité Atacalar, consciente de las asimetrías generadas por un modelo casi excluyente de desarrollo de la actividad agrícola- ganadera, propone con esta determinación, fomentar una nueva escala de valores en la que se presente al sector minero como parte fundamental del modelo productivo nacional y, para ello, deben generarse desde el marco regulatorio legal, los escenarios oportunos y previsibles para invertir. En su mayoría, las provincias argentinas integrantes del Atacalar, junto a la Región chilena de Atacama; tienen un amplísimo porcentaje de sus territorios ocupados por montañas y es justamente allí dónde se encuentran los recursos mineros. Por ello, potenciar esos recursos de esta Región puntual, significa consolidar un desarrollo simétrico y un modelo de inclusión que brinde igualdad de oportunidades para todos los habitantes de las naciones comprometidas en la empresa. En este sentido, la posición unánime de los representantes de las provincias argentinas que conforman Atacalar, fue trabajar en los puntos de encuentro, dejando de lado las prohibiciones que generan arbitrariedades; potenciar el desarrollo de la minería junto a todas las actividades productivas que signifiquen trabajo, progreso, educación y salud, cumpliendo inflexiblemente con la normativa ambiental que permita establecer el sostenimiento de la actividad.
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