En el mensaje del proyecto de ley de presupuesto enviado por el Poder Ejecutivo al Congreso de la Nación, está contemplado el otorgamiento de cupos fiscales, no utilizados por La Rioja, que vienen de la vieja ley de Reparación Histórica, en favor de la empresa Curtume Mucun, perteneciente al grupo brasileño Bom Retiro. Este grupo se quedó con la ex curtiembre Yoma ubicada en Nonagasta, en territorio riojano, y la promoción industrial comprometida asciende, según información de origen nacional, a los 130 millones de pesos. La Cámara de la Industria Curtidora Argentina (CICA) advirtió que dicha promoción industrial que se concedería a la ex curtiembre Yoma, "es un certificado de defunción para las pequeñas y medianas empresas del sector y la pérdida de una gran cantidad de puestos de trabajo". Solo en la provincia de Santa Fe están instaladas las plantas de Sadesa, ubicada en Esperanza, y Arlei SA en Las Toscas, departamento General Obligado. El presidente del bloque Frente para la Victoria de la Cámara de Diputados, Agustín Rossi, confirmó que está incluida esa promoción en el proyecto de presupuesto 2009. "Se trata de cupos fiscales no utilizados por La Rioja", dijo el legislador quien recordó que en su momento las industrias que se radicaran en esas cuatro provincias (Catamarca, San Juan, La Rioja y San Luis) contaron con exenciones impositivas especiales. "La única que utilizó totalmente los cupos fiscales asignados fue San Luis", remarcó.El grupo brasileño presentó su oferta de compra después de que la Justicia riojana dejara declarado desiertos tres procesos licitatorios para la venta de la ex curtiembre Yoma. No hubo tampoco interés por parte de las compañías radicadas en la Argentina. Bom Retiro ofreció para su compra 6 millones de dólares y comprometió para el futuro, otros 24 millones de igual moneda. Solicitó como contrapartida que el gobierno de La Rioja terminara la planta de tratamiento de efluentes industriales y contar con los aludidos cupos fiscales no utilizados. Hubo de parte del gobierno de la Nación, una promesa en tal sentido. La empresa reabrió sus puertas con 700 agentes de los 1.300 que tenía en la época de los Yoma. La compañía brasileña estima en el futuro llegar a los 1.000 empleados. Agustín Rossi indicó que había recibido a diputados que le solicitaron que se mantuviera esa promoción en el presupuesto, en tanto que otros, como los de la provincia de Buenos Aires le pidieron lo contrario, preocupados por las diferencias que se generarían con las plantas radicadas en el territorio bonaerense. El presidente del bloque reconoció que directivos de la firma Arlei SA le habían planteado su inquietud por las diferencias de carácter tributario que se generarían, pero dijo no haber tenido gestiones ni de los legisladores ni del gobierno de Santa Fe. Para los santefesinos, el tema no es menor dentro de la industria curtidora porque la planta ubicada en Nonogasta posee una alta capacidad de elaboración, alrededor del 20 por ciento del total de la comercialización de cueros de la Argentina. "Con ese volumen, son quienes terminan fijando el precio del producto", precisó un vocero del sector. El grupo Bom Retiro, en Brasil, tiene 13 plantas y elabora 12.000 cueros diarios en su país.
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