Contrarreloj, el Gobierno nacional espera sortear el jueves próximo la sanción del proyecto de adelantamiento de los comicios legislativos nacionales al 28 de junio y tener el camino legal allanado para abrir una campaña destinada a abrir un "plebiscito" sobre la gestión nacional. Esa tarea recaerá sobre el Senado nacional donde el oficialismo asegura superar los 37 votos necesarios para convertir en ley la iniciativa de modificación del calendario electoral. Será apenas 48 horas antes del plazo legal para realizar la convocatoria, inicialmente prevista para octubre. Las gestiones para garantizar los votos en la Cámara Alta fueron monitoreadas en las últimas horas desde la Casa Rosada. Anoche, en el poder central descontaban el respaldo de al menos 39 legisladores a la iniciativa que ya consiguió media sanción en Diputados. En el cierre de la semana, el oficialismo desistió de la posibilidad de sumar a tres senadores que perfilaban como indecisos: los representantes por el ARI de Tierra del Fuego, José Martínez y María Rosa Díaz, y el justicialista catamarqueño Ramón Saadi. "El piso de adhesión suma, hasta hoy, 39 votos. Podrían ser 40 con el respaldo de Horacio Lores (Movimiento Popular Neuquino)", le dijeron a este diario fuentes cercanas a la jefatura del bloque del Frente para la Victoria (FPV). La presión de la Casa Rosada apunta a evitar el fantasma de las fugas, la imagen que acecha al oficialismo en la Cámara Alta tras el fracaso en el debate por la resolución 125 de retenciones móviles en uno de los momentos más duros del conflicto con el campo. "Esta vez, no habrá sorpresas. El contexto es otro", descuentan en la Casa de Gobierno. Si, como especula, logra superar sin sobresaltos la prueba de la Cámara Alta, el Gobierno estaría en condiciones de abrir formalmente la campaña que tendrá al ex presidente Néstor Kirchner, y a su casi segura candidatura en la provincia de Buenos Aires, como figura central. El kirchnerismo asume la elección, según ampliaron las mismas fuentes del Gobierno, como un "plebiscito" de la gestión de Cristina Fernández y por eso tiene decidido articular la idea de "gobernabilidad" como uno de los ejes de la campaña electoral. A la bonaerense. Apenas sorteado el trámite parlamentario en el Senado en la próxima semana, el ex presidente reforzará sus apariciones en territorio bonaerense, el distrito en el que aspira a marcar la diferencia y sumar los votos que le permitan mostrar una "oxigenación" del gobierno de su esposa. Para cumplir con esa meta, Kirchner ultima el armado de la lista de candidatos en el primer distrito electoral. Aunque todavía no hubo ninguna notificación formal entre los funcionarios, en la Casa Rosada mencionan desde hace varios días al jefe de Gabinete, Sergio Massa, y a la ministra de Salud, Graciela Ocaña, como posibles candidatos en los primeros lugares de la lista legislativa.
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