LOS CAMBIOS EN SALUD YA ESTAN DECIDIDOS POR EL GOBERNADOR.

El gobernador Luis Beder Herrera aceptó la renuncia del secretario de Salud, Elio Díaz Moreno, y designó en su reemplazo a la jefa de la zona sanitaria de Chilecito, Liliana Díaz Carreño, al tiempo que continuaría al frente de la cartera, el ministro de Salud, Gustavo Graselli. Lo informó la propia Díaz Carreño al decir que “el gobernador nos pidió que llevemos este modelo (de Chilecito) a la provincia”. De esa forma, la jefa de la zona sanitaria reemplazará a Díaz Moreno, que días pasado había presentado su renuncia, aunque seguía en su despacho, había dicho Graselli. “Estoy dispuesta para trabajar cuando lo disponga el gobernador. Quiero agradecerle al gobernador esta posibilidad”, dijo Díaz Carreño, aunque desconoce la fecha de asunción en la Secretaría de Salud. “Quiero trabajar en cada uno de los hospitales, me voy trasladar personalmente, con dialogo directo y consensuado con autoridades locales”, aseguró. A su vez, el titular de la cartera seguiría en su cargo. En ese marco, Graselli defendió su gestión y sostuvo que La Rioja ha mejorado muchísimo su capacitación en la especialidad de neonatología, lo que ha permitido que más allá de los casos de fallecimientos que subieron momentáneamente la tasa de mortalidad infantil tras varios años de franco descenso, se pudiera hacer frente y salvar la vida a muchos otros pequeños que nacieron con problemas. Entre esas causas múltiples se menciona que el 50% de los nacimientos que derivaron en fallecimientos se debió a que se trataba de chicos que nacieron antes de término y con muy bajo peso, como así también por partos domicialiarios. El 30% de las defunciones registradas corresponden al sector privado y el restante 70% al sector público y la mayoría de las defunciones se registró en el primer mes de vida. Se está haciendo especial hincapié en la formación de los profesionales, incluso el hospital Enrique Vera Barros cuenta con una residencia de médicos en neonatología.