En los últimos días, incursionaron en esa senda, por caso, los mandatarios justicialistas José Alperovich (Tucumán), Luis Beder Herrera (La Rioja) y Daniel Peralta (Santa Cruz), además del gobernador de Río Negro, Alberto Weretilneck. En paralelo, lanzaron nuevos planteos de austeridad en el gasto los también peronistas Eduardo Fellner (Jujuy) y Lucía Corpacci (Catamarca). Esta instantánea se enmarca en la preocupante desaceleración de los ingresos por coparticipación y por la recaudación local, que derivó en un deterioro ostensible de las cuentas de algunos distritos, y en señales de alerta en otros. El escenario más agudo se vive en Santa Cruz, donde Peralta ya debió escalonar el cronograma salarial del mes pasado, y no puede garantizar aún el actual, que dependerá del lento goteo de recursos sobre las arcas locales, en medio de un escenario de fuerte ajuste del gasto público. «Voy a bajar mucho los gastos para priorizar los sueldos de la gente», remarcó en sintonía esta semana Beder Herrera en La Rioja, con la mente puesta en el pago de salarios y del aguinaldo. Por su parte, desde Tucumán, el ministro de Economía, Jorge Jiménez, confirmó que el distrito desplegará un ajuste del gasto público de $ 350 millones «para tratar de equilibrar la caja y no tener problemas», además de reconocer que las arcas locales «están exhaustas». En esa línea, Alperovich graficó las urgencias que atraviesan buena parte de las provincias. «Estuve en Bariloche con varios gobernadores: casi todos están sacando créditos y algunos no tienen para pagar el aguinaldo», reveló. Su Gobierno confirmó, sin embargo, que el pago del aguinaldo a los estatales se adelantará dos semanas, y pidió a los tucumanos «incentivar el consumo y cuidar el trabajo porque es necesario dar un signo de confianza a la sociedad». En tanto, en Río Negro, Weretilneck definió con su equipo económico una reducción del gasto público del 15%, respecto de la performance de la administración local de los primeros cuatro meses del año, publicó Ámbito Web. En este marco, y en medio de intimaciones de los gremios, el jujeño Fellner remarcó a su vez que su gestión mantendrá los parámetros de «la prudencia», «manejando no sólo los recursos con austeridad sino restringiendo el gasto lo más posible». El mandatario además enfatizó que es necesario «contar con un sistema financiero que funcione y dé respuesta a los trabajadores estatales, no sólo en el pago de sus sueldos en tiempo y forma, sino en hacer circular la economía en forma importante». En Catamarca, por su parte, Corpacci volvió a apelar días atrás a la necesidad de manejarse en el camino de la racionalidad del gasto, en el marco del control que despliega puertas adentro de su administración y en un mensaje dirigido a los concejos deliberantes e intendentes locales.
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