Atento a sus últimas declaraciones relativas a la minería, me dirijo respetuosamente no solamente al ciudadano, sino también al gobernador de mi provincia, nuestro gobernador. Parece una redundancia decir que su deber es representarnos como tal, pero “lo que abunda no daña”. Antes de ser gobernador se reunió con nosotros, con quienes no estábamos de acuerdo con la minería y se lo vio un poco ofuscado por nuestros reclamos de una ley que nos protegiera de “esa” minería y nos dijo que nuestra única esperanza era Ud. De igual manera, rescato en mi memoria, las muchas veces que, en un escenario político diferente, Ud. dejaba clara su postura opuesta a este sistema minero que hoy defiende. Debo entender que en la dinámica del cambio de relación de fuerzas, le ha generado una (r)evolución mental diferente a la mía, que lo ha llenado de convicciones en contra de lo que antes profesaba.
Escuchaba sus declaraciones días pasados cuando decía que “la ignorancia es atrevida”, e inmediatamente se me vino a la mente (osadía de mi incultura) otra frase popular que dice “el único animal que no se marea en las alturas es la mula”. Al comenzar a escribir también creí tener un “deja vou”. Pero no, algo parecido le había escrito a su antecesor, el Dr. Maza.
Y vuelvo a su representatividad. Resulta de mal gusto, desagradable diría yo, que nuestro gobernador, el de todos, ande buscando rótulos para encasillarnos, apodos para mencionarnos, motes para sectorizarnos. Para su ideario pasamos a ser “ambientalistas” primero, “soñadores”, después, dogmáticos, ignorantes, zurdos, ñoquis, etc., actualmente.
Permítame impertinencia de corregirlo: somos personas, gente común y silvestre, que como tal mantiene su individualidad y goza del derecho constitucional de ser de derecha, izquierda, centro, radical, peronista, gremialistas, católicos, evangelistas, protestantes, ateos, etc.
Como decía anteriormente, no creo sea necesario recordarle que es el gobernador de todos, de quienes lo votaron y quiénes no. Ahora, un gran número de estos seres humanos, de igual o distinto pensamiento, concepción ideológica, religión, profesión etc. coincidimos en un solo punto: defendemos la convicción de defender nuestra vida, que, casualmente, hasta no hace mucho parecía ser también su certeza. Esto lo sabe y por ello evitó que prosperara la consulta popular, para no dejar en evidencia la falta de licencia social de la actividad mencionada.
Sin ánimo de polemizar debo recordarle que su antecesor, el Dr. Maza, envió muchas veces comisiones “esclarecedoras” para debatir con los pueblos sobre minería y salieron como “rata por tirante” porque no tuvieron capacidad de contestar los planteos que los “ignorantes” les hacían.
Otro lamentable hecho que se repitió con el escándalo de hoy en el Club Atlético Chilecito y la pobreza de la exposición.
En cuanto a otro dato erróneo que maneja algún diputado oscilante, cercano a su evolución filosofal minera, dijo que las (2/3) dos tercias partes de la provincia eran montaña y Ud. aseveró que más del 60% de nuestro territorio tenía esa geografía. Para ser exactos, solo el 48% de La Rioja es de relieve montañoso, pero eso no nos habilita a achicar ese porcentaje.
Por último, quiero abusar de su memoria. Cuando dice que no hay libertad para elegir, recuerde que, justamente, en uso de nuestra libertad, las últimas elecciones ganó el candidato que estaba en contra de la minería, que, casualmente… era Usted.
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