Ricardo Alfonsín hizo escala en Mendoza. Se hizo un tiempo para visitar Los Andes y dejar algunas definiciones acerca de sus posibilidades, la relación Nación-provincias y la promoción industrial, el tema más candente de los últimos días en la provincia. Al respecto dijo que adhiere a la idea del candidato a gobernador de la UCR Roberto Iglesias: "Convocar a toda la región para resolver en conjunto, teniendo en cuenta las necesidades e intereses de todas provincias. Tal como está planteado, no se contemplan las necesidades e intereses de Mendoza", dijo el candidato a presidente del radicalismo. "Hay que convocar a toda la región para resolver el problema. Cristina no debería resolver esto ahora, sino esperar al proximo gobierno", apuntó. Se diferencia de la presidenta Cristina Fernández. La palabra diálogo suele repetirse, aún para referirse a la relación con los sindicatos, organizaciones que le hicieron la vida imposible a su padre cuando Raúl era presidente. "Hay muchos sindicalistas que están dispuestos a dar la discusión", dijo con tono sereno. Durante la charla nunca levantó la voz. Alfonsín está en plena campaña electoral, de cara a las primarias abiertas, simultáneas y obligatorias del 14 de agosto. Sabe que sus chances dependen de una buena elección, para llegar tonificado a las generales del 23 de octubre. También sabe que en primera vuelta no gana, pero exhibe su fe intacta para el balotaje. Tres fechas clave para Alfonsín, con una muy cercana en el calendario. Por esto habló de crecimiento con bienestar general, de las alianzas electorales del radicalismo y de los temas que abrieron la polémica en nuestra provincia. Alfonsín no vino solo a Mendoza. Lo acompañaron su compañero de fórmula, Javier González Fraga, y el candidato a la Gobernación de la Provincia de Buenos Aires, Francisco de Narváez, el peronista disidente con el que selló un acuerdo electoral. Además de los visitantes ilustres, lo acompañaron algunos radicales vernáculos de peso: El vicepresidente Julio Cobos, la fórmula a la gobernación local, Iglesias y Juan Carlos Jaliff, los candidatos a diputados nacionales Enrique Vaquié y Emma Cunietti, la senadora nacional Laura Montero y el presidente de la UCR mendocina César Biffi. La relación Nación-provincias y particularmente el reparto de recursos entre los distintos gobiernos. "Desde el momento en que asumamos, se termina la discriminación y la relación subordinación de las provincias respecto de la Nación y es reemplazada por una relación de cooperación". Ahí salió a completar la idea su candidato a vicepresidente, quien dice que la solución más fácil es que "la Nación ceda recursos. Lo propuso Lavagna y Néstor Kirchner no lo aceptó. Para reparar las injusticias con las provincias, no lo pueden poner las otras provincias, sino que debe salir de la Nación. La solución no pasa por discutir una nueva ley de coparticipación, porque no imagino a ningún diputado aceptando que le bajen los porcentajes a su provincia". Las tres fechas electorales son el gran enigma. El 14 de agosto será como una encuesta preliminar en la que los mejor posicionados quedarán en carrera. A tal punto es así que se especula con la posibilidad de que algunos candidatos no lleguen al 23 de octubre. Alfonsín siente que será el segundo y que su partido (con los aliados actuales, más lo que pudieran aparecer en el camino) es el único que puede ganarle a la temida Presidenta. "Según la información que nosotros tenemos, todavía ella está adelante. Tiene una ventaja que nosotros vamos a ir descontando, a medida que vayamos haciendo conocer nuestras propuestas, nuestras políticas de desarrollo industrial, de vivienda social y para la clase media, nuestra política para los ferrocarriles y de construcción de carreteras. Vamos a ganar en segunda vuelta. "Los únicos que podemos ganar en una segunda vuelta somos nosotros. Vamos a estar en esa segunda vuelta", asegura. Alfonsín admite que ha habido crecimiento económico en estos años de kirchnerismo. "El primer objetivo es transformar el crecimiento en desarrollo social. Todos los países de América Latina han crecido, incluso algunos más que nosotros, utilizando políticas distintas. Lo que revela que el crecimiento tiene que ver mucho más con el contexto internacional, que con los aciertos de la política del Gobierno. Hemos crecido a pesar de los errores cometidos por el Gobierno". Respecto de la minería, el candidato a la presidencia de la UCR asegura que valora la cultura de Mendoza respecto del cuidado del agua: "Todos sabemos que es un ejemplo la regulación del agua en Mendoza". Asegura estar cerca de esa cultura y recuerda que votó a favor de la Ley de Glaciares. "No soy un fundamentalista desde el punto de vista ecológico, pero Mendoza tiene que procurar no tomar decisiones que puedan poner en riesgo una cuestión central para la provincia como es el agua. Me parece que son los vecinos de Mendoza los que tienen que decidir lo que tienen que hacer", concluyó.
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