EUCOP es acusado de depender excesivamente del Poder Ejecutivo y de atender, primero, el interés de las compañías y después, el de la gente. Desde ARCo exigimos la participación de los consumidores en el ente como sucede en todo el país. Todas esas iniciativas tienen algo en común: el rol, cada vez más decisivo, de los ciudadanos. En general, al evaluar la actuación del ente regulador se ha puesto mayor énfasis en apuntar el déficit de “competencias técnicas” y de recursos como condicionantes para la efectiva implementación de sus potestades de contralor. No cabe duda de la necesidad de fijar un sistema coherente de normas y de dotar a las instancias reguladoras de los recursos técnicos, humanos y procedimentales apropiados para poder ejercer un control efectivo. Pero la presencia o ausencia de tales es solamente un indicador de que, en función de determinados objetivos, se podrá o no cumplir con las tareas necesarias para alcanzarlos. De hecho, más del 50% del personal de planta permanente de EUCOP es profesional y sus niveles salariales pueden equipararse a los del ámbito privado. Posee partidas importantes, sumas más que considerables en el marco de los recursos con que cuentan los organismos estatales para su gestión. Por eso puede afirmarse que el origen del problema no radica en la falta de capacidad técnica sino en la carencia de voluntad política para encarar con seriedad y rigor la función de control. El artículo 42 de la Constitución Nacional establece que el marco regulatorio de los servicios públicos debe ser fijado por el Congreso. Pero sólo tres entes (ENRE, Enargas y Autoridad Regulatoria Nuclear) han sido creados de esa manera. El resto nació de decretos del Poder Ejecutivo, aun luego de 1994. Esto es una flagrante violación a la Carta Magna. El artículo 42 establece también la participación de los usuarios en los organismos reguladores. Pero aún no hay voluntad política acerca de cómo elegir a los representantes de los consumidores y sobre si éstos deben integrar el directorio de los entes o no. El descontento de los consumidores marcará el rumbo de los próximos cambios. Los usuarios, con razón, no quieren que los llamen clientes; cliente es quien puede elegir, pero eso hoy no ocurre debido a la existencia de monopolios. El avance tecnológico hará desaparecer los monopolios; las empresas que no tengan clientes leales, los perderán. Las organizaciones de consumidores son los sindicatos de la sociedad post-industrial, el partido que sea capaz de convocarlas tendrá el poder político del futuro. Esta asociación ha recibido más de 300 reclamos por problemas de sobrefacturación, vencimientos adelantados, mala atención al cliente, infracción en el deber de información, todo tipo de incumplimientos en la prestación del servicio, pero son vetados por comerciales de la concesionaria distribuidora del servicio de energía eléctrica, EDELAR, produciendo un grave problema al bolsillo de los consumidores. Aunque la ley lo prohíbe, existen empresas distribuidoras que padecen y administran a las generadoras, produciendo un grave conflicto que oculta el monopolio en el sistema. Asimismo, aunque los facultativos de EUCOP, en sus magros e incompletos informes, no lo digan y que son culpables de nuestros padecimientos, las privatizaciones sostenían una sola premisa: la zanahoria de dichos contratos, que se les garantizaba a toda costa la ganancia en todo el contrato que dura varias décadas, de la que somos todos rehenes. Todos los cortes de luz que se padecen y la impunidad con la que se resuelven, son la causa no solo por los problemas de Generadoras, sino también por falta de infraestructura y los chantajes que dicha empresa ejerce para que las ganancias no decrezcan. Con el aumento encubierto que se vio seriamente afectado el ingreso de más de entre el 20 % al 30 % de los usuarios. Pero se les vuelve a garantizar a la empresa que sostiene el monopolio absoluto, además de poseer el control cruzado de todo el sistema. Basta con ver los balances, que no dicen toda la verdad, para observar que nunca pierden y que se acrecienta sus ganancias a través de los años. Esta Asociación considera que la garantía de ganancia como único fin de la empresa EDELAR es una flagrante violación de los derechos de los usuarios y más aun cuando en la mayoría de los servicios que han sido beneficiarios con los aumentos se encuentran con malo o deficiente servicio. Por ello se encuentra en estudio, realizar las acciones que correspondan en beneficio de los usuarios por las violaciones a los derechos de los mismos contra la empresa EDELAR y se lo denunciará penalmente al actual Presidente de EUCOP, Félix Moya, por la comisión de los delitos de “Incumplimiento en los deberes de funcionario público y Abuso de autoridad”.
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