Los directores-editores de los principales diarios del país manifestaron su preocupación por el impacto de la ley de medios que se discute en la Cámara de Senadores. Fue en la 47ª Asamblea General Ordinaria de ADEPA, que se realiza en Salta. El plenario discutió, según señalaron en ADEPA, un amplio temario dominado por “la preocupante situación que, para las libertades de prensa y de expresión, constituye el controvertido proyecto de ley gubernamental de medios audiovisuales”. Luis Tarsitano, en representación del matutino anfitrión El Tribuno, dio la bienvenida a los asambleístas con el convencimiento de “compartir, ante una realidad preocupante, la defensa de la libertad de expresión”. El presidente de ADEPA, Lauro Laíño, destacó que el periodismo libre “presta un noble servicio a la ciudadanía, a las instituciones, a la República” porque “es uno de los cimientos de la democracia”. La prensa argentina “está cercada por múltiples amenazas que alcanzan tanto a los intereses económicos como a los principios permanentes del periodismo, que no pueden ser desconocidos por urgencias coyunturales”, agregó. “No podemos hacer que deje de llover por ley, como tampoco por una ley se pueda cercenar la libertad de prensa y las que son su consecuencia, porque la libertad de prensa si no es la madre, por lo menos es la tía de todas las libertades”, indicó Laíño en alusión al proyecto de ley de medios. “Negros nubarrones se ciernen sobre nuestros diarios”, resumió. El gobernador salteño, Juan Manuel Urturbey, invitado especial a la sesión inaugural de la Asamblea, dijo que en “los momentos de crisis es cuando surgen con mucha más fuerza los principios rectores de quienes adoptamos la libertad como filosofía de vida”. En referencia a lo expresado por el presidente de ADEPA (que por ley no se puede decretar que deje de llover), recordó que Bernardino Rivadavia advertía, en 1826, que “los legisladores no pueden mudar o suplir la naturaleza de las cosas”. Y a continuación recordó que Juan Bautista Alberdi también alertaba, en “Las Bases”, que “la Constitución debe dar garantías de que sus leyes orgánicas no serán excepciones derogatorias de los grandes principios consagrados por ella”. “Es preciso -continuó el gobernador- que el derecho administrativo no sea un medio falaz de eliminar o escamotear las libertades y garantías constitucionales. Por ejemplo, la prensa es libre, dice la Constitución, pero puede venir la ley orgánica de la prensa y crear tantas trabas y limitaciones que la deje ilusoria y mentirosa”. A continuación, Laíño ser refirió a las actividades de ADEPA, incluyendo las tratativas con funcionarios del Gobierno Nacional sobre la apremiante situación fiscal de la mayoría de los medios del país y los atrasos de la agencia Télam en el pago de la publicidad oficial. Luego de un cuarto intermedio, habló Enrique Santos Calderón, presidente de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) y director del matutino El Tiempo, de Bogotá (Colombia). Advirtió sobre las pretensiones de varios gobiernos latinoamericanos, entre los que mencionó especialmente los de Venezuela y de la Argentina, de “implementar leyes” tendientes a “limitar la labor periodística bajo la sospechosa excusa de pluralidad de voces”, por lo cual dijo que ADEPA y otras instituciones que agrupan a los medios de comunicación “deben estar alertas ante los peligros que se ciernen sobre la libertad de prensa”. Santos Calderón se refirió concretamente al gobierno argentino, al decir que los continuos ataques verbales a medios periodísticos demuestran “su frágil vocación democrática” y que el proyecto sobre medios audiovisuales que envió al Parlamento pretende convertir “al Poder Ejecutivo en una suerte de Gran Hermano que dicte las políticas a las que se deben ajustar los medios de comunicación”.
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