La jefa de Estado, Cristina Fernández de Kirchner, se puso al frente de la política minera que impulsa su segundo mandato. Mientras que los ambientalistas se oponen en varios sectores del país, entre ellos en las localidades riojanas de Chilecito y Famatina, la propia presidenta apuesta a una “integración vertical y bajo todas las condiciones de sustentabilidad ambiental” de la inversión en todas las provincias cordilleranas, entre ellas La Rioja. En el departamento Castro Barros, el gobernador Luis Beder Herrera destacó la “valentía” del intendente Marcelo del Moral por defender una de las políticas de gobierno más importantes para los próximos años, como es el desarrollo productivo con minería. También reprochó aquellas posturas que pretenden instalar esta alternativa como una forma de “delinquir” o “pecar”, cuando en realidad se trata de una de las actividades madre de todas las industrias, ya que “sin minería no tendríamos ropa, autos, ni computadoras”. Recordó que el 60 por ciento de la geografía de La Rioja está formada por cerros, y no tiene posibilidades de producir soja, por ejemplo, entonces debe explotar sus recursos naturales, cuidando el medio ambiente En Mendoza, Cristina Fernández anunció que la minera brasileña Vale do Rio Doce hará una inversión de 5.900 millones de dólares en 30 meses en la localidad mendocina de Malargüe para la explotación de potasio para la fabricación de fertilizantes. "Eso nos permitirá seguir siendo país líder en agroactividad" y "bajo todas las condiciones de sustentabilidad", aseveró. Y sostuvo que se trata de "la inversión más grande en todo el mundo en minería". La Presidenta juzgó que se trata de la explotación "más importante en minería" y aseguró que se realizará "bajo todas las condiciones de sustentabilidad ambiental, condición sine qua non" para sellar el acuerdo. Destacó también que el proyecto implica una "integración vertical", que beneficiará a varias provincias y que derivará en inversiones para la construcción de un nuevo puerto en Bahía Blanca y para la puesta en marcha de 400 líneas de ferrocarriles de carga. El desarrollo de la actividad está atado además a la puesta en funcionamiento en la cuenca neuquina de un yacimiento de gas no convencional para garantizar el abastecimiento de energía para los trabajos de extracción de cloruro de potasio. Es que una vez que entre en funcionamiento -el arranque de las operaciones se prevé para 2013- se estima que la mina requerirá una alta cantidad de metros cúbicos de gas por día.
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