viernes, 12 de octubre de 2012

PARECE QUE OLVIDARSE DE CRISTINA TIENE SU COSTO.

Emilio Pérsico es el referente del Movimiento Evita. Se lo reconoce como “el barbudo” y hoy es uno de los escudos que tiene el cristinismo en la provincia de Buenos Aires. Ya en la Casa Rosada no se habla de kirchnerismo sino del proyecto que encarna Cristina Fernández de Kirchner. Pérsico hace dos meses atrás estuvo en La Rioja antes de asumir como funcionario del Ministerio de Agricultura y durante una cena con el intendente Ricardo Quintela y el diputado Carlos Luna, entre otros, había anticipado lo que hoy se huele en el ambiente político riojano. Esa comida se sirvió en un salón del Hotel Talampaya, donde Pérsico pidió salir a militar por Cristina en la provincia, ya que la Residencia de Olivos ve que los gobernadores se olvidan de hablar de la gestión presidencial. Y esa noche el actual funcionario cristinista, amigo de la senadora Teresita Luna, había hablado que se venía el control absoluto de la obra pública y según luego como lo presentó el ministro Julio De Vido, la Nación trabajará directamente con los intendentes en el financiamiento. Así la Presidencia de la Nación le saca el control de la obra pública y personalizará la “bajada” de recursos. El principal enojo de Cristina, como lo había manifestado el referente del Movimiento Evita y también lo había deslizado la senadora Luna, es que las provincias, y en este caso La Rioja, ocultan quien paga la obra. Durante los dos días de visita Pérsico recorrió obras y hasta sacó fotos, donde observó que el logo de la Presidencia era el gran ausente de los carteles de obra. En la Casa Rosada pone en la mesa ese como uno de los temas por lo cual la imagen negativa a crecido de la jefa de Estado por encima de los propios gobernadores. El entorno cristinista está convencido que transmiten la falta de gestión a la Nación y en las provincias con mayor dependencia, cada día se nota aún más.Todos los meses, a través de dos consultoras, el gobierno nacional mide en todo el país, no solo la intención de voto sino las sensaciones. Así tiene de primera mano avanzar en cada una de las provincias, como ha sucedido en la mismísima Santa Cruz, donde su gobernador está acorralado. La Rioja no está excluida de esa decisión presidencial, ya que maneja información directa. Cabe acotar que Teresita Luna es secretaria de la Mujer del PJ nacional y la ex senadora Ada Maza, es integrante del directorio del Banco Hipotecario. Es decir, como cualquier político en Capital Federal se cruzan datos para tratar de entender cada una de las realidades. Quizás esa sea una de las bases, por el cual el gobernador le dio tanta importancia al Encuentro Nacional GESTAR. Se habla de una movilización sin antecedente, no solo para que le den un apoyo a él sino que sea un mensaje a Balcarce 50. Es llamativo el interés de todo un gobierno para que La Rioja haga todo bien, mientras que GESTAR es solo una escuela. La invitación al acto en las afueras del Paseo Cultural “Castro Barros” tiene el rostro de Cristina y habla de Lealtad, aunque el día sea el 17 de octubre. Lo cierto es que el bederismo se moviliza y más allá de lo que se dijo, puede ser más porque algo se rompió en la Casa Rosada.

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