GERMÁN GRACIA SIGUE CON PROBLEMAS, AHORA EN "CHAÑAR".

El Instituto provincial del Agua informó hoy que sigue con atención los inconvenientes que se puedan producir por falta de agua y pidió a la población de Chañar que no se deje engañar por quienes siendo cómplices y partícipes voluntarios del desorden hídrico de la zona, hoy opinan por los medios y dan soluciones mágicas adjudicando responsabilidad al IPALAR. En ese sentido el organismo recordó que el mismo delegado municipal y el ex integrante del Consorcio de Agua que era resistido por su actuación al frente de esa entidad intermedia -que inclusive mereció el repudio de los vecinos que cortaron la ruta reclamando la intervención de las autoridades- hoy se quejan de la inversión que realizó el gobierno y hablan de la falta de presión y de caudal. Es por ello que el IPALaR recuerda que antes de hacerse cargo, los que hoy critican consintieron la construcción de un acueducto de 90mm cuando tenían un acueducto de 160mm realizado en abesto con todos los inconvenientes que ello origina. Un acueducto como el que consintieron sólo podría haberse realizado si es que quienes lo aprobaron lo hicieron pensando en que la población disminuiría con el paso del tiempo. Desde que se hizo cargo del servicio, el IPALAR realizó las perforaciones Nepes 1, 2 y 3 brindando solución a una zona que por años con contaba con suministro de agua. Y no solo ello, también en la zona cuentan ahora con un estanque de 300.000 litros destinado a la producción ganadera de la región sumandose a ello una cuarta perforación (Nepes 4) con un acueducto de 16 kilómetros que aporta agua a Los Alanices y en breve a Los Aguirre. El organismo explicó que continuará trabajando para entregar el mejor servicio posible en el actual marco de situación de temperaturas intensas que aumentan considerablemente el consumo de agua en la región y anunció para 2013 un nuevo acueducto para esa región de 160 mm y una planta de rebombeo en la localidad de El Alto de Corral de Negro, obra planificada y proyectada por el Instituto, que debió hacerse con antelación, y en los antiguos acueductos, pero que lamentablemente, quienes estuvieron a cargo y hoy opinan, por entonces, no tuvieron ni el deseo ni la visión para realizar.