El gobierno provincial dio a conocer la posibilidad de afectación de varios programas de asistencia social, debido a la supuesta merma en la llegada de fondos nacionales. Si bien esa merma puede producirse en los fondos que llegan vía coparticipación federal; no lo es en el caso de los fondos extra coparticipables que se han asegurado por la firma del convenio de los 400 millones de pesos entre provincia y Nación. Querer esconder la incapacidad para el ejercicio de la gestión pública y trasladarla al gobierno nacional, es la posición más cómoda propia de aquellos a los que les importa muy poco la gente, excepto en los momentos en que esa gente es utilizada como rehén en épocas electorales.No es justo para los riojanos que se nos quiera plantear un escenario de caos cuando al erario público entrarán más de 18 millones de pesos por mes que fueron acordados justamente para llevar tranquilidad laboral a los riojanos asegurando así el cumplimiento del pago de salarios y de los planes sociales. Por otra parte, si la actividad económica en general se reduce por la crisis internacional, es justamente en ese momento en que el Estado debe proteger a su población con toda la batería de medidas, programas y recursos con las que cuenta, ya que de eso se trata gobernar. No es cortando el hilo por lo más fino, sino conteniendo a los sectores que mayor vulnerabilidad presentarán a la coyuntura de desaceleración económica que pueda plantearse. Gobernar es mucho más que sentarse en la caja esperando que entre más dinero; o ¿esperará el gobernador que la Nación venga a pagarle a la provincia?. Es él, quien teniendo el convenio de los 400 millones debe gestionar en Buenos Aires su correcta asignación en tiempo y forma. Es el gobierno quien debe tranquilizar a la población en vez de generarle angustia y temor con la única intención de seguir guardando plata en los colchones y en la caja; plata que mágicamente saldrá en las elecciones. Riojanos, no debemos olvidar que el mismo sistema de caos se generó previo al acto eleccionario anterior, y el último mes aparecieron un sinnúmero de becas, subsidios, aumentos, y vales de sumas increíbles para la compra de alimentos en supermercados. No nos dejemos influenciar por el temor que desde hace dos años venimos padeciendo, no nos dejemos vencer por la desesperanza y exijamos a nuestros representantes que trabajen defendiendo los intereses del pueblo
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