LUIS ZAMORA LE CIERRA LAS PUERTAS A LA OPOSICIÓN EN EL TRIBUNAL DE CUENTAS.

El presidente del Tribunal de Cuentas, Luis Zamora, rechazó el reclamo que hace el radicalismo para ocupar cargos en el organismo de control. Se trata del reemplazo de dos de los cinco miembros (vocales) que lo integran: Gabriel Martín, quien ingresó por el Frente con Todos e Hipólito Mercado, designado por un partido departamental vinculado a la UCR pero con origen en Aimogasta, donde el radicalismo está aliado al intendente Gustavo Minuzzi. Para Zamora, los candidatos a renovar esas bancas deberán ser elegidos por los actuales partidos opositores de la Legislatura y no por los partidos electos en los comicios del pasado 28 de junio. Según el presidente del Tribunal, de esa forma deberán ser el partido departamental ‘Arturo Illía’ -de Aimogasta-, banca que ocupa el diputado Nieto -aliado de Minuzzi- y el partido Lealtad y Dignidad -banca que ocupa Jorge Basso- quienes deberán designar reemplazantes de Martín y Mercado. Pero incluso, en el caso del menemista Lealtad y Dignidad, la vocalía sugerida podría recaer en otro aliado del oficialismo, ya que la banca de ese partido, que ocupa Jorge Basso, se fusionó al bloque oficialista bederista de la Cámara y fue a elecciones en junio como parte del Frente del Pueblo gobernante. Allí es donde el oficialismo ‘colaría’ al ex candidato a legislador Jorge Menem. Así dada la explicación de Zamora la Unión Cívica Radical, primera minoría tras los comicios de junio, no podrá designar reemplazantes porque sus diputados recién asumirán en diciembre. En cambio, las vocalías en el Tribunal vencen entre fines de agosto (Mercado) y principios de setiembre (Martín). La UCR, a través del diputado nacional electo Julio Martínez, había reclamado la semana pasada la facultad de designar al menos un miembro en el Tribunal, habida cuenta que será la principal fuerza opositora en la Legislatura apenas tres meses después. La otra vocalía, si se toma en cuenta el resultado electoral, le correspondería a la alianza entre Lealtad y Dignidad y Acción Riojana, por la cual ingresó a la Cámara el dirigente Néstor Bosetti. Sin embargo, las palabras de Zamora no hacen mas que anticipar la postura que tendrá el -por ahora- mayoritario y único bloque oficialista en la Legislatura. Es decir, designará un reemplazante el radicalismo aimogasteño aliado al cuestionado intendente de Arauco Gustavo Minuzzi y el menemismo ‘bederizado’ que representa Jorge Basso. Tras conocer la posición del titular del Tribunal de Cuentas, el diputado nacional electo, Julio Martínez, le pidió al oficialismo que ‘respete la voluntad popular’ y sostuvo que ‘50 mil riojanos votaron por mas control’ hacia la gestión del gobierno. ‘Si quieren buscar artilugios siempre los van a tener y si quieren no respetar para manipular las leyes y la Constitución, como siempre lo han hecho, no tienen margen político y quiere decir que hay algo por lo cual no quieren que los controlemos y pagarán un costo muy grande ante la sociedad, al quedar en evidencia”, disparó el legislador. Incluso su par provincial, el diputado electo Guillermo Galván, le pidió al gobierno que ‘se cumpla lo que se dice, porque se va en contra del sistema y no de un partido político en particular’. Y recordó que el propio gobernador había salido a garantizar la representatividad del radicalismo en los órganos de control. Sobre fines de la semana pasada, el gobernador había dicho todo lo contrariado a lo deslizado por Zamora este lunes. “Los Concejos Deliberantes y la Cámara de Diputados les darán el lugar que les corresponde. Les vamos a dar la participación que merecen”, dijo el gobernador Beder Herrera. Ahora Zamora pareció ir a la inversa.