CARPA PIDIÓ MÁS APOYO PORQUE EL VALOR DEL DÓLAR Y LA INFLACIÓN AFECTAN LAS ECONOMÍAS REGIONALES.

El dólar y la inflación no tendrán las modificaciones a las que aspira CARPA para el año próximo y si bien cuestionó lo que propone el Presupuesto 2013 porque esos valores afectan las economías regionales, también reconoció los incentivos que recibe el sector. Por eso cree que para sostenerlas deben incrementarse las políticas de subsidios o mecanismos de protección a la producción. Tras un análisis del proyecto de Presupuesto para el 2013 que el Gobierno nacional presentó en el Congreso consideró que los valores previstos para el dólar y la inflación no son los que la realidad cotidiana demuestra. La Cámara Riojana de Productores Agropecuarios (CARPA) apuesta a una mayor devaluación del peso y a un reconocimiento de los costos internos, vía reconocimiento de la inflación, para mejorar la situación de las economías regionales. CARPA, expuso su opinión en una editorial publicada en su Boletín semanal, donde cuestiona fuertemente el valor del dólar y de la inflación pero también reconoce que existen mecanismos que atenúan estas distorsiones como los reintegros a las exportaciones, los bonos de transporte y los impuestos diferenciales, entre otros, que tienen su costo, pero que protegen a las economías regionales por una “decisión política” del Gobierno nacional. Creen que esa política proteccionista deberá incrementarse para lo cual “debe atenderse y entenderse a las economías regionales, comenzando por cada Provincia”, para “llevar como corresponde al Congreso de la Nación las necesidades presupuestarias de cada Provincia o región que atiendan este problema”, por eso se preguntan si el presupuesto nacional “contempla a los miles que viven y trabajan en nuestras economías regionales” y si “existirá la decisión política de salvar a las economías regionales”. En su análisis sobre la relación entre el Presupuesto nacional y las economías regionales mencionan la necesidad de que este prevea las obras de infraestructura como rutas, obras de gas, energía, diques etc. que si se hacen las beneficiará y si no las afectará, aunque consideran más vital para el sector “lo que debe leerse entre líneas” y que es el valor del dólar oficial fijado para el año próximo en $ 5.10/ U$S porque será el valor con que se liquiden las exportaciones. También la inflación estimada por el Estado para sus proyecciones en un 10.8 % anual. Para el sector productor, el desfase entre el tipo de cambio oficial y el ritmo en que aumentan los insumos afectan principalmente a aquellos que exportan porque se paga con el valor oficial de modo que “si un determinado producto se exporta al mismo precio en dólares año tras año, (es decir no aumenta ya que está fijado al tipo de cambio oficial) pero los insumos que se necesitan para fabricarlo o producirlo, aumenta siguiendo el ritmo de la inflación y el dólar paralelo, año a año, llega un momento en que deja de tener rentabilidad, se entra en quebranto y se deja de exportar. Todo esto está ocurriendo”.