El gobernador Beder Herrera compartió con la comunidad feligresa de San Blas de Los Sauces, la misa en honor al santo patrono San Blas que ofició el obispo de La Rioja, monseñor Roberto Rodríguez. Una nutrida cantidad de fieles acompañó la celebración de la misa y luego participó de la procesión con las imágenes de San Blas y San Blacito. En las primeras horas de la tarde tuvo lugar la bendición de las gargantas. Además del mandatario provincial, tomaron parte, la vicegobernadora Teresita Luna; el diputado provincial Sergio Casas, la titular de la Unidad Ejecutora, Teresita Madera y los intendentes de San Blas, Antonio Sotomayor y de Arauco, Gustavo Minuzzi. El Obispo recordó la historia del santo, aquel hombre que se había retirado para tener una vida solitaria y sus bajadas en horas de la noche para poder predicar el Evangelio porque era perseguido por el emperador diocesano debido a su gran popularidad y llegada a la gente, a la que curaba, sanaba y ayudaba. Asimismo, resaltó la gran difusión que tiene San Blas, principalmente en España y manifestó que en el mundo hay 50 Iglesias dedicadas al santo. También relató el porqué de la bendición de las gargantas y explicó que en aquella época acudió una mamá con su pequeño niño que tenía una espina en la garganta y fue sanado. Instó a reflexionar sobre la enseñanza del Señor de ser Discípulos y seguidores “Jesús llamó a los 12 y los envió de 2 en dos” y manifestó que los envió sin cargas para que puedan caminar con la liviandad de la libertad. En ese sentido, dijo que “tenemos que ser livianos en nuestras cargas; no estar atados a cosas que no nos sirven; no tenemos que pesar nuestra carga con cosas innecesarias”. Convocó a la reflexión para ser discípulos y seguidores; “ser discípulo es un compromiso, significa jugarse por el Evangelio y hacerlo carne; lo cual genera algunas veces, reacciones y contradicciones con el pensamiento del común de la gente”. También resaltó la paz, que trae orden y tranquilidad; la austeridad y la justicia como elementos que se deben tener en cuenta. Finalmente, requirió que “el compromiso de San Blas en el año 300 sea el compromiso nuestro en el tercer milenio para que podamos ser testimonio de Jesús”. Las autoridades provinciales y departamentales acompañaron a la comunidad feligresa en la procesión con las imágenes del Santo Patrono alrededor de la plaza. A continuación, el Obispo antes de impartir la bendición final de la ceremonia religiosa, reconoció y agradeció al Gobernador, la vicegobernadora y las autoridades departamentales por la obra y las tareas de refacción realizadas en el templo, las obras y la parquización. Consideró que todas ellas ayudan para crecer en la madurez social y en el cuidado del espacio público” y pidió a Jesús que siga enviando su espíritu para que podamos aprender a vivir con austeridad con nosotros mismos, con justicia para los demás y piedad para Dios. Al término de la procesión, Beder Herrera resaltó “la hermosa fiesta de San Blas, en un día hermoso y con mucha gente que ha llegado de todos lados para participar de estas fiestas patronales”. El mandatario resaltó la refacción de la parroquia que contó con el apoyo del Gobierno provincial y dijo que es la primera vez que viene al templo que “ha quedado hermoso”. Sobre el mensaje del obispo de la paz, consideró que la sociedad riojana está tranquila y reflexionó que la paz es un concepto que resume la tranquilidad del espíritu de la gente que cuando se tiene trabajo, justicia, educación y salud en las familias hay paz. La procesión culminó frente a la Parroquia por donde hicieron su paso los “Maratonistas de San Blas” una familia de atletas que desde 1990 tienen la tradición de llevar a San Blas y agradecerle recorriendo el departamento. Seguidamente, hizo su presentación el ballet local y seguidamente las agrupaciones gauchas “San Blas”, “Salicas” y “San Nicolás”.
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