Es que parte de la sociedad de Famatina esta juntando firmas para poder solicitar la urgente revocatoria del mandato de su legisladora provincial, por su fuerte defensa al desarrollo de la minería en su departamento. La diputada Olima recibió un fuerte respaldo de sus pares justicialistas y un grupo de vecinos de la localidad del Oeste. Según se informó oficialmente, “la totalidad de los diputados que integran el Bloque Justicialista pronunciaron su respaldo y acompañamiento hacia la legisladora por el departamento Famatina, Adriana Olima, que por su adhesión al proyecto de desarrollo con minería ha sido agredida y debió afrontar situaciones difíciles”. Los diputados, en la reunión de la bancada justicialista que fue encabezada por el vicegobernador Sergio Casas, se solidarizaron con su par, Adriana Olima a quien respaldaron y bregaron “para que las diferencias sean subsanadas desde el debate, con respeto, igualdad y conocimiento”. El legislador Jorge Basso manifestó que “nos hemos visto sorprendidos sobre el tratamiento que ha tenido la diputada Olima en su departamento, y todos nos hemos solidarizado con ella como una expresión también de anhelo para que las diferencias que existan en la sociedad solamente pueden ser subsanadas desde el debate, con respeto, igualdad y conocimiento”. Basso enfatizó que “todos absolutamente respaldamos y acompañamos a nuestra compañera”. Por su parte, el diputado por Chamical, Enrique Nicolini señaló que “todos coincidimos en la delicada situación que está viviendo la diputada Olima, que está siendo agredida y pasando momentos difíciles” y recordó que cuando asistió a una reunión realizada en Famatina, “también fui agredido, ahora le toca a ella que vive ahí; por eso todos los diputados del Bloque nos unimos para respaldarla”. Vecinos del departamento Famatina hicieron público el apoyo a la legisladora y expresaron su firme posición de apoyo al crecimiento y desarrollo de su lugar de origen. Allí expresan que “como ciudadanos responsables y con derecho a opinión, decimos que la minería es una explotación que genera trabajo y desarrollo en donde se la pueda realizar”. Sin pretender polemizar y mientas hubo una explotación minera en Famatina, tuvo un importante polo productivo de desarrollo agrícola- ganadero. El documento lleva la firma de alrededor de 300 vecinos de Famatina. Entre los firmantes está el director del Hospital de Famatina, Rodolfo Gaetán (DNI 6.723.417), y el docente Luis Galleguillo (DNI 12.827.897). Indica que “históricamente, a partir del año 1870 y hasta 1950, con la minería estuvimos en iguales condiciones económicas que la región de Cuyo, porque el oro y la plata que se extraía del Famatina, se acuñaban monedas que circulaban por esa región”. Agregan que “con la minería se producía trigo y para su molienda, había siete molinos y obteníamos harina propia; con la minería había alrededor de treinta puestos de ganaderos en las montañas, por lo que el recurso ganadero era de miles de cabras, miles de ovejas y miles de vacas. Donde aparte de carne, venían a comprar los acopiadores de cuero y lana desde otras regiones. Además de la venta de animales para la zona de Vinchina, Vila Unión, Villa Castelli, Chilecito, etc.”. “Con la minería teníamos dos bodegas, donde se aprovechaban las uvas de nuestro departamento para vinificar, también los productores realizaban pasas y arrope; con la minería se instalaron dos emporios que son centros de comercio donde hay florecimiento económico de la región. Ahí se vendían las mejores telas y elementos de plata y otros enchapados con este metal. Desde el exterior se traían máquinas segadoras, enfardadoras y otras que tenían que ver con el agro. Funcionaban en la plaza principal, y hoy esos lugares funcionan como locales bailables”, sostienen en el documento. También recuerdan que “con la minería se fabricaban alfajores por la gran cantidad de huevos que se recogían desde Los Corrales hasta Plaza Vieja; con la minería, las festividades de San Pedro, patrono de los mineros, duraban tres días, allí el pueblo se preparaba para recibir los mineros que bajaban desde las montañas con dinero o con oro y plata que cambiaban con lo que necesitaban”. Plantean los vecinos que “Famatina era un polo productivo por excelencia, su población era de alrededor de ocho mil habitantes en ese entonces, hasta que la minería dejó de explotarse, y así comenzó el éxodo hacia otros departamentos, pero especialmente al Sur del país, a los yacimientos mineros (de YPF)”. “Hoy tenemos la gran posibilidad de recuperar esa producción y desarrollo, porque tendremos a quienes vender. Si pensamos en producir frutas únicamente no podremos, porque nadie quiere arriesgarse, y esto está demostrado al observarse que hay un 70% de las fincas que están con plantaciones de frutales secos y descuidadas”, indican. Advierten que existen organizaciones mundiales como la OMS (Organización Mundial de la Salud), OEA (Organización de Estados Americanos) y la UNICEF, quienes nunca han emitido algún comunicado sobre las explotaciones mineras, acerca de que cesen sus actividades, ya que son ellas las que deberían hacerlo. Finalmente, expresan su solidaridad “con los ingenieros de minas, técnicos y todas aquellas personas que llevan el pan a sus hogares y que trabajan en esta actividad”.
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