FORTALECEN LA PRODUCCION CAPRINA LOCAL.

El Gobierno Provincial decidió intervenir fuertemente en la cadena de valor de los productos de origen caprino. Como medida, se pusieron en funcionamiento dos centros de faena, uno en Chamical y el otro en Milagro. En el caso de Chamical, está calificado como de tránsito federal que permite comercializar los cabritos faenados a otras provincias. La carne faenada en Milagro se destinará al mercado local. El secretario de Ganadería Silvio Murúa explicó que la intervención en la cadena de valor de los productos de origen caprino es importante para los productores cabriteros que se verán beneficiados. Los dos centros de faena que se pusieron en funcionamiento se encuentran en Chamical y Milagro. Murúa destacó que en el caso de Chamical se logró obtener la calificación de transito federal lo cual permite la salida de cabritos faenados hacia otras provincias. En el caso de Milagro, la carne de cabritos que se faena está destinada al mercado local. De este modo, los productores cabriteros se benefician en el sentido de que el Gobierno generó un precio y un fondo para comprar el cabrito, que es mejorador del precio que pagan los cabriteros en otras provincias.Por otra parte, resaltó que “ahora nuestra gente está prefiriendo vender los cabritos porque le garantizamos la comercialización y a su vez estamos llegando con sanidad, infraestructura y genética para los productores riojanos”. Murúa aseguró a la comunidad que a partir de esta intervención vamos a tener continuidad en la oferta de la carne de cabrito. Como dato importante e indicador de la buena calidad lograda, el funcionario relató que “hacemos una selección de los cabritos antes de la faena, cuidamos los detalles relacionados a la presentación del cabrito que viene empaquetado en bolsas plásticas siguiendo con todos los cuidados bromatológicos y preservando la cadena de frío” y acotó que “esto es gracias a que disponemos de un camión que nos permite mantener temperaturas hasta 18 grados bajo cero”. Además, puntualizó que “es bueno porque al productor que está disperso nosotros con nuestras camionetas lo buscamos casa por casa, recorriendo los campos, recogemos los cabritos y lo ponemos en una sintonía en la que tiene garantías de que a medida que vaya mejorando la calidad y cantidad se los vamos a poder comercializar mejor”.