KIRCNER QUIERE SALIR POR ARRIBA DE SU LABERINTO.
Lo saben sus hombres de mayor confianza y lo intuyen muchos dirigentes de la oposición: Néstor Kirchner piensa en "algo grande" para salir de uno de los peores momentos que soporta el Gobierno desde 2003. Los kirchneristas hablan de "jugada maestra" y los principales líderes de la oposición ya casi dan por descontado que no va a haber internas abiertas y que las elecciones presidenciales podrían ser adelantadas para que Cristina llegue al final de su mandato "en condiciones normales". "Algo grande" sería, según la fantasía de quienes todavía confían en esta administración, un anuncio importante o una sucesión de anuncios impactantes que pongan la atención de la opinión pública lejos de la crisis y le permita al Gobierno pasar a la ofensiva. "Algo grande" sería, por ejemplo, la difusión de "información muy sensible" vinculada con la batalla diplomática contra Inglaterra por la intención de los británicos de explorar el mar para descubrir petróleo en una zona cercana a las islas Malvinas. Por ejemplo: datos que involucrarían a una empresa argentina en la venta de material a la petrolera inglesa encargada de la exploración. "Le garantizo que si se confirma eso ocuparía la tapa de los diarios por unos cuantos días", vaticinó un alto funcionario del Gobierno, incómodo por la inminente derrota en el Parlamento. Tigre enjaulado. Los que estuvieron con Kirchner días después de la operación de la carótida coinciden en que parecía "un tigre enjaulado". Afirman que como no podía viajar en avión ni moverse con total libertad, gastaba su energía dando muchas órdenes en muy poco tiempo. Ellos lo oyeron imaginar diferentes escenarios políticos con la intención de "salir por arriba" del laberinto en el que lo tienen atrapado el Fondo del Bicentenario, la nueva relación de fuerzas en Diputados y Senadores y los aumentos de precios. "Está igual que después de la derrota del 28 de junio. Conciente del mal momento, pero dispuesto a pasar a la ofensiva y demostrar que es más inteligente que toda la oposición junta", informó un incondicional. El hombre además recordó la sucesión ininterrumpida de leyes que el Gobierno consiguió aprobar mientras sus adversarios seguían festejando la victoria. Según esas fuentes, a la intención de la oposición de modificar el Consejo de la Magistratura y el Instituto de Estadística y Censos (INDEC), Kirchner no solo piensa responder con el veto presidencial. Además, analiza poner sobre la mesa iniciativas polémicas y capaces "de partir a la Argentina por la mitad". Una de ellas: la ley para aprobar el casamiento entre homosexuales. Otra "gran jugada maestra" que todavía sigue cajoneada pero Kirchner no descartaría es la reestatización parcial o total de Yacimientos Petrolíferos Fiscales (YPF). El ex presidente del Banco Central, Martín Redrado, ya había confirmado esa posibilidad y la intención de usar las reservas para hacerlo. Y Sebastián Eskenazi, el empresario argentino que maneja en los hechos la petrolera, nunca dejó de pensar que Kirchner sería capaz de plantear y ejecutar semejante decisión. Los miembros de la mesa chica del ex jefe del Estado están convencidos de que la mayoría de la sociedad apoyaría "la nacionalización" de la empresa más grande de la Argentina. Calendario K. Si bien el kirchnerismo no se caracteriza por tomar decisiones a mediano o largo plazo, el ex presidente estaría empezando a reflexionar sobre su futuro político y el de su esposa, más allá de la semana que viene. Hombres que piensan en el próximo turno presidencial como Carlos Reutemann, Francisco de Narváez, Mauricio Macri y Eduardo Duhalde están casi seguros: Kirchner no convocará a internas abiertas porque no tendrá ninguna posibilidad de ganarlas. Ninguno de ellos lo dirá en público para no ser acusado de golpista o destituyente, pero la verdad es que no descartan la posibilidad de que el Gobierno anticipe la fecha de las elecciones presidenciales para que el tiempo de ejercicio del poder no los termine desgastando de manera irreversible. ¿Es una alternativa real o solo es ficción política? "Néstor no está pensando ahora mismo en adelantar el calendario electoral", dijo un hombre de su confianza. Encerrado en la quinta de Olivos, el ex mandatario se entretiene imaginando una cancha a su medida.
Por Luis Majul. Especial para lanacion.com
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