El ministro de Infraestructura Javier Tineo destacó el nivel de producción que tiene la Curtiembre de Nonogasta, “algo en lo que el gobierno ha trabajado muchísimo”. “Está en el 95% de la producción, con más de mil empleados”, afirmó luego de realizar una visita a la obra de la planta de tratamiento de efluentes, invitado por la diputada Silvia Gaitán y autoridades chileciteñas. Confirmó que la obra civil de la planta está en un 50% y resaltó que “no sólo eliminará los olores, sino también trabajará en la depuración de los líquidos”. La visita, que se concretó el viernes, incluyó un recorrido por algunos distritos de ese departamento, a fin de “ver diferentes necesidades que están planteando”, indicó el funcionario. El ministro, que fue acompañado por la diputada Gaitán, el viceintendente Luís Soteras y funcionarios municipales, informó que particularmente visitamos la obra de la planta de efluentes, una de las más importantes que el gobierno de la provincia, en conjunto con la Nación, están financiando y que es el tratamiento primario de los efluentes industriales de la curtiembre”. Recordó Tineo que se trata de “una vieja demanda de Nonogasta y Chilecito”. Al referirse a las características de la planta de tratamiento de los Efluentes, dijo que “es un procesamiento complejo, que busca fundamentalmente mitigar los olores que la planta de la Curtiembre vino emitiendo”. Rechazó algunos comentarios que indicaban que a los líquidos no se los depuraba, sino que simplemente se mitigaba los olores, “en realidad se hace un proceso muy complejo que incluye ambas tareas”. Consultado por medios locales acerca del monto de inversión de la obra, explicó que alcanza los 12 millones de pesos sobre una licitación pública que se ha hecho con financiamiento de la Secretaría de Ambiente de la Nación. Respecto de los principales objetivos de la obra, dijo Tineo que el objetivo es “atacar dos problemas concretos: el tema de los olores que sofocan a todo Chilecito y Nonogasta y la enorme cantidad de agua que produce la planta”. En este contexto, el ministro afirmó que la empresa “está en el 95% de la producción, con más de mil empleados, que el Gobierno ha trabajado muchísimo en ese punto de vista de la producción, de la productividad y el empleo”. Confió Tineo que los técnicos explicaron que “el agua va a estar en condiciones –por ejemplo- de utilizarse para riego para forestación (pinos, eucaliptos y otros) que puedan ser utilizados como madera para combustible”. Ante una consulta sobre los destinos del agua reciclada, el Ministro prefirió ser “muy cuidadoso” y advirtió que no pueden hacer “compromisos de la utilización”. No obstante, admitió que el Gobernador de la provincia, “tiene muchos proyectos e iniciativas que le han acercado, que buscan hacer una utilización eficiente de la misma, fundamentalmente orientado a la sociedad”. Entre ellas -por ejemplo- plantas para parques, para ser utilizadas en plazas, como así también, se analizará “la posibilidad de que sirvan para riego de algún tipo de cultivo”, indicó el Ministro. Según el ministro Tineo, la planta de tratamiento de efluentes de la Curtiembre “tiene dos etapas grandes”. Por un lado, la parte civil, es decir, el trabajo referido a la cobertura donde se incorporaran los equipos. Y la segunda parte, son los equipamientos (transformadores, y diferentes equipos que ayudan a los procesos biológicos que se aplicarán). Estos “son los más costosos, ya están encargados y tiene procesos de industrialización de construcción e inmediatamente completada la parte civil, se estarán instalando”. En cuanto al estado de avance de la obra, Javier Tineo adelantó que “la certificación de la empresa está en la mitad, un 50 %”. Para ello, el gobierno de la provincia “fue adelantando los fondos –sostuvo Tineo- y lo seguirá haciendo porque el Gobernador lo dijo claramente: no va a resignar tiempo y la provincia va a poner los fondos necesarios hasta que lleguen los de la Nación, para asegurar que los tiempos (de la obra) no se atrasen”. Cabe acotar que el plazo de ejecución es de un año, según Tineo se calculó (durante esta visita) “un avance del 50% y en función del tiempo demandado en la adquisición de los equipos, por lo menos, en los próximos seis meses, podría ser inaugurada esta primera etapa de la obra de Tratamiento de los Efluentes”. En la segunda etapa se hace un procesamiento concreto sobre todo los componentes que vienen en el agua –incluida el cromo- que es lo que permitirá naturalmente, no solo mitigar el olor, sino generar un tratamiento final de todo lo que es la industrialización que tiene la Curtiembre hoy.
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