El gobierno de La Rioja impulsa un proyecto para generar energía eléctrica por biomasa a partir de todos los residuos que se obtienen de las plantas agroindustriales, donde hay tratamiento tanto de la aceituna como de la uva y de la nuez. Como la poda del olivo tiene un gran volumen, primero habrá que picarla con máquinas especializadas, para luego cargarla en camiones que harán el traslado a una caldera. Con el calor y el vapor que allí se produce, más la ayuda de una turbina, se podrá generar energía, que incluso hasta podría ser vendida al mercado mayorista, para subvencionar este programa, que se articulará en conjunto con el sector privado. Esto ya se hace en la región española de Andalucía, que es la de mayor producción de olivo, donde desde hace diez años usan este tipo de energía. Con el fin de tomar las mejores prácticas, está previsto que una delegación de funcionarios, empresarios e inversores riojanos viaje allí para mediados de año. Con esta implementación, se podrá bajar la contaminacíon ambiental, en pleno auge de la mano del incremento de la industrialización, y en franco crecimiento. El año próximo La Rioja prevé duplicar su producción de olivo, y llegar a los 160 millones de kilos, por los que prevé facturar u$s 112 millones en ventas a Brasil, los Estados Unidos y Venezuela, además del mercado interno. Otro de los beneficios sería la baja de los costos de producción, ya que la energía representa el 35% del total: como el agua que se utiliza es subterránea y se debe extraer del suelo, el precio de la energía incide considerablemente. El secretario de Agricultura riojano, Jorge Ortiz, adelantó a El Cronista que, de esta manera, “nos proponemos hacer más competitivo el sector, y atraer inversores nacionales e internacionales, que podrían llegar de dos países tradicionales olivícolas como España e Italia”. Los productores de esos países ya no tienen donde expandirse, ya que quedan pocos lugares donde plantar olivo, mientras el consumo mundial se encuentra en pleno incremento debido a los beneficios que tiene para la salud. Según el gobierno, se impulsasría la cadena productiva, más emprendimientos con más puestos de trabajo y también mayores ingresos en concepto de impuestos para la provincia. Por otra parte, el secretario de Agricultura admitió que, en la actualidad, “somos dependientes del sistema eléctrico nacional en el consumo de energía. Pero ya empezamos a utilizar los generadores eólicos, y si logramos autoabastecernos con la generación energética por biomasa, lograremos más exportaciones”. Para avanzar con este proyecto, trabajan en conjunto los equipos técnicos del ministerio de Infraestructura provincial con los de Enarsa.
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