Puntualmente, la provincia busca desarrollar cada vez más el cultivo de nogales por las características del clima y los vientos, situación que busca ser aprovechada por pequeños y medianos productores que en los últimos tiempos se volcaron a la actividad. Paulo D´Alessandro, productor del Famatina, explicó su modelo de producción y comercialización del producto. Una de las zonas más dedicadas al cultivo es el faldeo oriental de las Sierras de Famatina, donde los productores acopian los frutos para poder venderlos durante todo en año y no sólo en época de cosecha. “En el país hay muchas ventajas para hacer un producto diferenciado”, explicó a la agencia estatal de noticias Télam Paulo D´Alessandro, uno de los productores de la región. La nuez tiene sus meses fuertes de marzo a junio, luego, muchos de los “oportunistas” que cosechan y venden aprovechando ese tiempo en el que el fruto abunda, se quedan sin material. Algunos empresarios como D´Alessandro le dieron una vuelta más al asunto y decidieron acopiar la nuez con cáscara (lo que se comercializa es la pulpa de la nuez) para conservarla en su hábitat natural y poder sacarle provecho todo el año, cuando las demandas comienzan a acentuarse y las ofertas a escasear. “El problema es que de ahora a junio hay nueces en todas partes. Está el productor, chico o mediano, que carga y vende, pero si al mismo tipo en noviembre lo llaman, no va a tener nueces. El tema es acopiar y venderla cuando ya no se cosecha”, subrayó D´Alessandro, gerente de la Finca Huayrapuca, en Famatina. “El hecho de acopiar sin pulsear, eso me garantiza tener un buen producto todo el año”, agregó. D´Alessandro decidió instalarse en la Finca hace cuatro años. Tenía ganas de emprender un proyecto agropecuario pero al ver como abundaban los nogales, terminó por darle forma a ese negocio. Junto a su mujer, Claudia, sembraron y trajeron nuevas plantas, sacaron las especies que no colaboraban con la siembra, plantaron más frutales, remodelaron el casco original y se instalaron. Aunque su vida esté en La Rioja capital, van dos o tres días a la semana para hacer un control riguroso de la mercadería. “Nosotros tenemos mercado únicamente nacional y el 80 por ciento son distribuidores de gastronomía y de panificación, y tenemos zonas que respetamos a los distribuidores. Si nos llama una heladería o panadería de un lugar donde tenemos distribuidor, lo respetamos, pedimos que le compren al distribuidor”, explicó D´Alessandro. Para el productor, en la Argentina “hay margen para vender producto ueno, porque en ese caso no competiría” y la apuesta es mejorar la calidad y así diferenciarse: “Lo que se hace con la nuez a nivel nacional es de baja calidad. Es raro encontrar algo de calidad y serio. Cuando vos haces un producto diferenciado, se nota. Y en el país hay muchas ventajas para hacer un producto diferenciado”, explicó. “El producto malo rinde hasta julio, después no tienen nada y ahí es donde está la ventaja”, agregó el riojano. D´Alessandro vende sus productos a todo el país, en especial a la región Patagónica y la provincia de Buenos Aires. Su meta es crecer de a poco para luego exportar, pero antes afianzar su producción en el interior del país. “Con el crecimiento entre el 7 y el 15 nos conformamos. El año pasado, del 2008 al 2009 crecimos en ventas un 50 por ciento pero creo que fue asentar lo que hicimos”, reflexionó el productor que reconoce haber procesado el año pasado 45.000 kilos de nuez con cáscara. La finca promete creer más y amplió la estancia para recibir visitas. Así agregaron servicio de visita guiada a la plantación y quebradero, habitaciones para que el turista se quede unos días, donde disfrutará de los mejores platos y podrá conocer de la historia del valle. “Los clientes van creyendo de a poco en nosotros. Saben que el producto es bueno y que no les fallamos”, añadió. La zona por la cantidad de horas de frío necesarias, muy baja humedad, gran amplitud térmica y abundantes días de sol, predisponen la sanidad y el desarrollo ideal para obtener una nuez de alta calidad. Debido al bajo régimen de lluvias, el riego se hace necesario y a diferencia de la zona cordillerana, aquí las aguas de riego provienen exclusivamente del deshielo de la montaña.
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