Una cartera que no estuvo a la altura de las necesidades sociales, sino más bien a la altura de las necesidades personales. La indignidad en el hombre, lo mas fácil de conseguir hoy en día en nuestra sociedad, con personas que solo aspiran al beneficio propio, cualquiera sea el precio para alcanzar esa condición, Es moneda corriente y ya forma parte de nuestras vidas, con la gravedad que eso significa como ejemplo para todos nosotros. Y de estas aguas “no benditas”, bebió el ministro de desarrollo social Delfor “Pocho” Brizuela, al no detener los hechos de corrupción de esta cartera; que aprovechándose de la pobreza de la gente, transformó el área más sensible del gobierno provincial, en una oficina de negocios, lucrando con la dignidad de los mas pobres. Señalo solo este hecho delictivo, como emblemático, que fuera denunciado recientemente y con actuación del juez de instrucción Héctor Barría, referido a la venta de mercaderías, cuyo único destino era la mesa de los riojanos más humildes y fue comercializada con supermercados de nuestro medio. Mas indigno aún es acopio de mercaderías que debían ser repartidas para palear el hambre de nuestros niños y fueron a parar a la hoguera por estar vencidas; esta conducta debe ser marcada como inmoral y obscena más aún teniendo en cuenta el origen y el discurso que lo llevo al poder a este ministro. Además, si nos preguntamos ¿ porqué la fábrica Puma, debió cambiar su política de donaciones de zapatillas y se vieron obligados a quitar la entrega de las mismas, a funcionarios de Desarrollo Social? Vergonzosamente debemos respondernos que las zapatillas puma se vendían, reemplazándolas en muchos casos por otras de muy baja calidad. Podemos continuar enumerando otros tantos actos que solo logran desprestigiar al gobierno; las recategorizaciones de funcionarios que hicieron caso omiso a los pedidos del gobernador en lo referido a “dar ejemplo” de austeridad ante la crisis generalizada, además del uso indebido de fondos a través de ONG y desviación de dineros para financiar la campaña política. Estos hechos que son de conocimiento público, seguramente conocidos por las autoridades de contralor tal es el caso del Tribunal de Cuentas de la Provincia de La Rioja. Hoy mas que nunca, el área de desarrollo social, debió ser mas transparente, la de mayor cuidado a la hora de manejar los recursos sociales, en consonancia con un gobierno que asumió enarbolando las banderas de la “glasnot” (transparencia), con un fuerte contenido de de compromiso social, bajo el lema: “gobierno del pueblo de La Rioja”, que se ve empañadas por la gestión de Délfor Brizuela, quien antes de asumir el 24 de noviembre como diputado provincial, debería dar respuestas a la sociedad. Y en caso de comprobarse el manejo irregular, la Cámara de Diputados podrá poner en marcha los mecanismos que la Cámara tiene previsto. A dos años de gestión del gobernador Beder Herrera, considero oportuno corregir el rumbo de su gestión de gobierno; eliminando hechos de corrupción, “tallar y dar de nuevo” debería ser el objetivo para encarar la otra mitad de su gestión. Con políticas claras, transparentes, alejadas de todo acto de corrupción e indiferencia por el destino de los fondos sociales.
Lic.Daniel E. Rodríguez
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