FINALMENTE LA JUSTICIA REMATO BIENES DE LA FAMILIA YOMA.

Por la quiebra del Grupo Yoma, la Justicia riojana mandó a remate un total de 13 inmuebles situados en varios puntos del país. De entre ellos, dos propiedades ubicadas en el norte pampeano no obtuvieron ofertas durante la subasta. Se trata de dos importantes parcelas a la vera de la ruta 188, en cercanías de la localidad de Adolfo Van Praet, en el departamento Realicó. Una de ellas, de 167 hectáreas, salió con una base de 2.750.000 pesos, en tanto la otra, de 250 hectáreas, fue valuada para la subasta en 4.120.000 pesos. Desde el cuerpo de síndicos que gerencian la empresa durante el concurso preventivo y la quiebra, indicaron que la base con la que salieron estas propiedades está acorde con los precios del mercado pero que en los remates suelen ir con valores bastante más bajos. Es por ello que los inversores especulan ahora con que la Cámara en lo Civil y Comercial de Chilecito vuelva a subastarlos con bases menores. El viernes, en la sala de remates del Banco Ciudad de Buenos Aires, había algunos interesados en las tierras pampeanas -al menos un productor de la zona y otros inversores de Capital Federal- que recién se retiraron del lugar cuando se aseguraron que no hubo ofertas. Los campos en Van Praet son sólo dos de las propiedades que la Justicia riojana mandó a subasta bajo la carátula "Yoma S.A. y otros s/concurso preventivo por agrupamiento - hoy quiebra". También ser remataron casas en Catamarca, Córdoba y La Rioja, locales fabriles en Chilecito, Avellaneda, Lanús y en el parque industrial riojano, además de otros dos campos en Potrero de Garay (Córdoba). Estos últimos fueron los que más puja generaron entre los compradores. La movida especulativa en el caso los campos pampeanos fue clara: los posibles inversores evitaron entrar en la puja y ahora esperarán que la Justicia subaste nuevamente estas tierras, sacándolas a remate con bases más bajas. Sin embargo, tal decisión quedará en manos de la Cámara Civil, Comercial y de Minas de Chilecito. La quiebra de Yoma S.A. fue pedida por un pasivo de más de 300 millones de pesos que la firma tiene principalmente con el Banco Ciudad de Buenos Aires, el Banco Provincia y el Banco Nación - entre otros acreedores menores - quienes le prestaron alrededor de 140 millones de dólares en "condiciones blandas". Era la década del "90, cuando el grupo riojano tenía llegada directa a la Casa Rosada. Manejado por la familia política del entonces presidente Carlos Menem, la empresa recibió no sólo créditos blandos sino también regímenes de promoción industrial y otras ventajas impositivas para la exportación de cueros. La curtiembre era manejada por los cuñados del primer mandatario. Otro gran acreedor de los Yoma es la AFIP, que le reclama al Grupo la devolución de 1.278.502 pesos (a valores de junio de 1998) por "aprovechamiento indebido de subsidios tributarios". Según el organismo recaudador, la curtiembre habría violado los artículos 3 y 5 de la ley Penal Tributaria, ya que hizo uso de las devoluciones de IVA por exportaciones sin haber completado los respectivos expedientes. Por esta otra causa, desde este lunes pasarán por la Justicia los hermanos Emir, Omar, Alfredo, Guillermo, Karim y Leila Yoma, además de otros ejecutivos de la firma. El hecho establece penas que van desde los tres a nueve años de prisión. En tanto, y mientras se rematan los bienes Yoma, el grupo brasileño Bom Retiro se hizo cargo de la "Curtiembre Nonagasta". Y para mantener la explotación exigió que Nación devuelva los beneficios de la promoción industrial, campaña que encabezó el propio gobernador riojano Luis Beder Herrera en una reciente reunión con el jefe del Gabinete, Alberto Fernández.