El Gobierno nacional le restó 12,8 millones de pesos a la asistencia social para remodelar la Casa de Gobierno y la Quinta de Olivos. Con estos fondos provenientes de los subsidios a empresas privadas, el oficialismo pretende pintar algunas áreas, crear un salón de conferencias y arreglar patios internos. La decisión administrativa 84, publicada en el Boletín Oficial, manifiesta la necesidad de “incrementar el presupuesto de la Secretaría General de la Presidencia de la Nación a fin de atender gastos de adecuación edilicia”. La normativa está firmada por el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, y por el ministro de Economía, Amado Boudou. Con esta maniobra, el Gobierno transferirá 11,9 millones de pesos para remodelar la Casa de Gobierno y continuar con la segunda etapa de refacciones de cara al Bicentenario. Según fuentes encargadas de realizar las tareas, con estos fondos pretenden recuperar dos lucernarios (techos de vidrio que cubren las escaleras), arreglar el Patio de las Palmeras, porque tenía baldosas rotas y problemas con las cloacas, construir un nuevo salón de conferencias, pintar el salón de los bustos, instalar aires acondicionados y remodelar el espacio de los granaderos. A fines del año pasado, el oficialismo había aprobado girar tres millones de pesos destinados a las reconstrucciones en la Casa de Gobierno para financiar los gastos en traslados de la presidenta, Cristina Fernández, y para el mantenimiento de la flota de aviones. Los otros 950 mil serán para arreglar techos y realizar tareas de pintura en la Quinta de Olivos. Los fondos para financiar las obras provienen del subprograma de asistencia social, que incluye los subsidios que reciben las empresas privadas para financiar gastos corrientes, como las partidas para que no despidan personal. El jefe de Gabinete tiene la potestad de modificar la distribución de las partidas presupuestarias, a partir de los superpoderes. El diputado de la Coalición Cívica Adrián Pérez manifestó que con esta maniobra el Gobierno demuestra cuáles son sus prioridades, porque “saca subsidios para las pymes y los tambos para remodelar la Quinta de Olivos y la Casa Rosada”. Y agregó en diálogo con Crítica de la Argentina que el “discurso progresista del Gobierno se desploma porque muestra que sus prioridades están muy lejos de las necesidades de la gente”. El diputado e integrante de la Comisión de Presupuesto Juan Carlos Morán aseguró que “la Presidenta vive en un tupper porque frente a la crisis social y económica que vive el país saca plata de un programa de asistencia social para remodelar los jardines y la Casa de Gobierno”. El legislador de la Coalición Cívica agregó que para resolver la cuestión de fondo es necesario eliminar la potestad que le permite al jefe de Gabinete redirigir las partidas presupuestarias por fuera del Congreso, y una vez que ya fueron aprobadas en el Parlamento.
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