EN LA RIOJA EL JUSTICIALISMO ABRE EL PARAGUAS.

El justicialismo riojano abre el paraguas. Cada sector hace su juego nacional y poco se habla de Néstor y Cristina, aunque ellos estén en la Casa Rosada. Alejandra Oviedo es amiga del diputado nacional y presidenciable, Francisco De Narváez, pero quien lo trae el jueves a La Rioja es Luis María Agost Carreño. Aunque lo recibirá también la chepeña, que es diputada provincial en el bloque que responde a Luis Beder Herrera, cuyo jefe político es Néstor Kirchner, ya que es titular del PJ nacional. Agost Carreño fue intendente capitalino y es el hombre PRO en La Rioja, aunque tiene diálogo con el gobernador. Néstor Bosetti es el nuevo ladero de Luis Barrionuevo, quien es el jefe de campaña en el norte del ex presidente Eduardo Duhalde, quien pretende volver a la Casa Rosada. Bosetti es diputado tras una alianza con Carlos Menem, pero hoy logró que Beder Herrera le ceda el área de Transporte. Mientras tanto, Nicolás Martínez también participa en el Gran Buenos Aires de actos duhaldistas. El arauqueño además ingresa a la Residencia Oficial. Adrián Menem quiere ser gobernador de la provincia, pero no desconoce que el tiempo de su tío ya venció. A nivel nacional también se sienta con el duhaldismo. Teresita Luna es una de las pocas que se acuerda del matrimonio presidencial. La vicegobernadora levanta las banderas de Néstor y Cristina, pese que los compromisos no se cumplan con la provincia. Ángel Maza no descarta un frente cívico con Julio Martínez. El ex gobernador fue hombre de Kirchner hasta el día que la Nación le dio la espalda por su destitución. En tanto, el diputado nacional responde a los lineamientos del radicalismo. Primero el presidencial era Julio Cobos, pero ahora las encuestas hablan de Raúl Alfonsín (h). Tras que recibió al salteño Juan Manuel Urtubey, otro presidenciable ligado a Alberto Fernández, Beder Herrera mira ese juego que no es desconocido para la Casa de Gobierno. Quizás sea un llamado de atención a la Casa Rosada, ya que los anuncios nacionales no se han concretado, pese que la provincia no tiene peso político. Lo que seguro sucederá en los medios porteños que De Narváez tendrá una importante difusión por su paso en La Rioja y hasta la foto podría ser con el mismísimo gobernador, quien estaría dispuesto a recibirlo en su despacho. Así todos empiezan a olvidarse de los Kirchner.