La Cámara de Estacioneros Blancos de la República Argentina (Cebra) reúne a 150 propietarios de estaciones, seis de los cuales hacen además, a través de torres de destilación, refinación de crudo con una capacidad pequeña (10.000 m3 por mes). El relanzamiento de la Cámara de Estacioneros Blancos de la República Argentina (Cebra), que agrupa a expendedores independientes, se produjo este jueves con un pronóstico que provocará controversias: su presidente, Santiago Cúneo, proyectó un precio de $ 6 para el litro de nafta en agosto. "Las petroleras están buscando un litro a un dólar y medio y lo van a conseguir", dijo el empresario en un almuerzo con periodistas. Cebra reúne a 150 propietarios de estaciones, seis de los cuales hacen además, a través de torres de destilación, refinación de crudo con una capacidad pequeña (10.000 m3 por mes). Cúneo, ex operador político de Carlos Menem en los 90 y accionista de la firma Febra Petrol SA, hizo una fuerte crítica de la política energética del Gobierno y cuestionó a las petroleras y la privatización de YPF. "Las petroleras se han decidido por el No produzco y cobro caro . Es una ecuación única en el mundo. Necesitamos que el Gobierno se defina, que no se quede a mitad de camino: si vamos a una regulación de precios, una verdadera intervención, que estaticen YPF; si no, que liberen el mercado, que es lo que preferimos. En ambos modelos, las blancas podemos ser competitivas; lo que nos mata es la indefinición, esto de estar subsidiando a las petroleras oligopólicas para que importen combustible a través de Enarsa. Si el Gobierno habla por izquierda y actúa por derecha, que lo aclare. ¿Para qué regulás, si el precio en surtidor no va a bajar y vas a tener faltante?" ¿Por qué cree que el Gobierno, que hace dos años frenaba los aumentos, ha dejado de hacerlo?, le preguntó La Nación. "Porque el Gobierno tiene intereses en el negocio. Yo no soy amigo ni de Cristóbal López ni de Eskenazi; lo que pretendo es que se trate a todos por igual", contestó. Cúneo cree que privatizar YPF fue una pésima decisión y que "los Kirchner deben estar arrepentidos de haberlo apoyado". Dice que decidió relanzar la cámara, que fue creada en 1998 y dejó de operar en 2002, para agrupar las estaciones en un proyecto para instalar puntos de venta que expendan sólo gasoil y lubricantes, lo más rentable del negocio. Pretende crear un fideicomiso con la garantía inmobiliaria de las estaciones para invertir en surtidores y para eso le pidió una reunión al ministro de Planificación, Julio De Vido. "Sería muy bueno que lo creara un banco nacional", dijo, y pronosticó que, por la reducción de costos que le significaría no comprarles a las petroleras sino a las pequeñas refinadoras de Cebra, podría vender el litro de gasoil a $ 2,98. "Volvemos para proponer este proyecto, porque está claro que la política energética fracasó."
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